29
Entonces os dije: No temáis, ni tengáis miedo de ellos.
30
El SEÑOR vuestro Dios, el cual va delante de vosotros, él peleará por vosotros, conforme a todas las cosas que hizo con vosotros en Egipto delante de vuestros ojos;
31
y en el desierto has visto que el SEÑOR tu Dios te ha traído, como trae el hombre a su hijo, por todo el camino que habéis andado, hasta que habéis venido a este lugar.
32
Y aun con esto no creisteis en el SEÑOR vuestro Dios,
33
el cual iba delante de vosotros por el camino, para reconoceros el lugar donde habíais de asentar el campamento, con fuego de noche para mostraros el camino por donde anduvieseis, y con nube de día.
34
Y oyó el SEÑOR la voz de vuestras palabras, y se enojó, y juró diciendo:
35
No verá hombre alguno de estos de esta mala generación, la buena tierra que juré que había de dar a vuestros padres,
36
excepto Caleb hijo de Jefone; él la verá, y a él le daré la tierra que pisó, y a sus hijos; porque fue perfecto con el SEÑOR.
37
Y también contra mí se airó el SEÑOR por vosotros, diciendo: Tampoco tú entrarás allá.
38
Josué hijo de Nun, que está delante de ti, él entrará allá; anímale; porque él la hará heredar a Israel.
39
Y vuestros chiquitos, de los cuales dijisteis: Serán por presa; y vuestros hijos que no saben hoy lo bueno ni lo malo, ellos entrarán allá, y a ellos la daré, y ellos la heredarán.