11
Y oyendo Saúl y todo Israel estas palabras del filisteo, se conturbaron, y tuvieron gran miedo.
12
Y David era hijo de un varón efrateo de Belén de Judá, cuyo nombre era Isaí, el cual tenía ocho hijos; y era este hombre en el tiempo de Saúl, viejo, y de gran edad entre los hombres.
13
Y los tres hijos mayores de Isaí habían ido a seguir a Saúl en la guerra. Y los nombres de sus tres hijos que habían ido a la guerra, eran: Eliab el primogénito, el segundo Abinadab, y el tercero Sama.
14
Y David era el menor. Y habiendo ido los tres mayores tras Saúl,
15
David había ido y vuelto de estar con Saúl, para apacentar las ovejas de su padre en Belén.
16
Venía, pues, aquel filisteo por la mañana y por la tarde, y se presentó por cuarenta días.
17
Y dijo Isaí a David su hijo: Toma ahora para tus hermanos un efa de esta cebada tostada, y estos diez panes, y llévalo presto al campamento a tus hermanos.
18
Llevarás asimismo estos diez quesos de leche al capitán de los mil, y cuida de ver si tus hermanos están buenos, y toma prendas de ellos.
19
Y Saúl y ellos y todos los de Israel, estaban en el valle del Alcornoque, peleando contra los filisteos.
20
Se levantó, pues, David de mañana, y dejando las ovejas al cuidado de un guarda, se fue con su carga, como Isaí le había mandado; y llegó al atrincheramiento del ejército, el cual había salido en ordenanza, y ya tocaban al arma en batalla.
21
Porque así los israelitas como los filisteos estaban en ordenanza, escuadrón contra escuadrón.