3
Porque Jehová es Dios grande; Y Rey grande sobre todos los dioses.
4
Porque en su mano están las profundidades de la tierra, Y las alturas de los montes son suyas.
5
Suya también la mar, pues él la hizo; Y sus manos formaron la seca.
6
Venid, adoremos y postrémonos; Arrodillémonos delante de Jehová nuestro hacedor.
7
Porque él es nuestro Dios; Nosotros el pueblo de su dehesa, y ovejas de su mano. Si hoy oyereis su voz,
8
No endurezcáis vuestro corazón como en Meriba, Como el día de Masa en el desierto;
9
Donde me tentaron vuestros padres, Probáronme, y vieron mi obra.
10
Cuarenta años estuve disgustado con la nación, Y dije: Pueblo es que divaga de corazón, Y no han conocido mis caminos.
11
Por tanto juré en mi furor Que no entrarían en mi reposo.