10
Porque Moisés dijo: Honra á tu padre y á tu madre, y: El que maldijera al padre ó á la madre, morirá de muerte.
11
Y vosotros decís: Basta si dijere un hombre al padre ó á la madre: Es Corbán (quiere decir, don mío á Dios) todo aquello con que pudiera valerte;
12
Y no le dejáis hacer más por su padre ó por su madre,
13
Invalidando la palabra de Dios con vuestra tradición que disteis: y muchas cosas hacéis semejantes á éstas.
14
Y llamando á toda la multitud, les dijo: Oidme todos, y entended:
15
Nada hay fuera del hombre que entre en él, que le pueda contaminar: mas lo que sale de él, aquello es lo que contamina al hombre.
16
Si alguno tiene oídos para oir, oiga.
17
Y apartado de la multitud, habiendo entrado en casa, le preguntaron sus discípulos sobra la parábola.
18
Y díjoles: ¿También vosotros estáis así sin entendimiento? ¿No entendéis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar;
19
Porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale á la secreta? Esto decía, haciendo limpias todas las viandas.
20
Mas decía, que lo que del hombre sale, aquello contamina al hombre.