8
También de los de Gad se huyeron á David, estando en la fortaleza en el desierto, muy valientes hombres de guerra para pelear, dispuestos á hacerlo con escudo y pavés: sus rostros como rostros de leones, y ligeros como las cabras monteses.
9
Eser el primero, Obadías el segundo, Eliab el tercero,
10
Mismana el cuarto, Jeremías el quinto,
11
Attai el sexto, Eliel el séptimo,
12
Johanán el octavo, Elzabad el nono,
13
Jeremías el décimo, Machbani el undécimo.
14
Estos fueron capitanes del ejército de los hijos de Gad. El menor tenía cargo de cien hombres, y el mayor de mil.
15
Estos pasaron el Jordán en el mes primero, cuando había salido sobre todas sus riberas; é hicieron huir á todos los de los valles al oriente y al poniente.
16
Asimismo algunos de los hijos de Benjamín y de Judá vinieron á David á la fortaleza.
17
Y David salió á ellos, y hablóles diciendo: Si habéis venido á mí para paz y para ayudarme, mi corazón será unido con vosotros; mas si para engañarme en pro de mis enemigos, siendo mis manos sin iniquidad, véalo el Dios de nuestros padres, y demándelo.
18
Entonces se envistió el espíritu en Amasai, príncipe de treinta, y dijo: Por ti, oh David, y contigo, oh hijo de Isaí. Paz, paz contigo, y paz con tus ayudadores; pues que también tu Dios te ayuda. Y David los recibió, y púsolos entre los capitanes de la cuadrilla.