10
Porque tú eres grande, y hacedor de maravillas; tú solo eres Dios.
11
Enséñame, oh SEÑOR, tu camino; caminaré yo en tu verdad; afirma mi corazón para que tema tu nombre.
12
Te alabaré, oh SEÑOR Dios mío, con todo mi corazón; y glorificaré tu Nombre para siempre.
13
Porque tu misericordia es grande sobre mí; y has librado mi alma del hoyo profundo.
14
Oh Dios, soberbios se levantaron contra mí, y conspiración de fuertes ha buscado mi alma, y no te pusieron delante de sí.
15
Mas tú, Señor, Dios misericordioso y clemente, lento para la ira, y grande en misericordia y verdad;
16
mira en mi, y ten misericordia de mí; da fortaleza tuya a tu siervo, y guarda al hijo de tu sierva.
17
Haz conmigo señal para bien, y véanla los que me aborrecen, y sean avergonzados; porque tú, SEÑOR, me ayudaste, y me consolaste.