3
que amolaron su lengua como espada, y armaron por su saeta palabra amarga
4
para asaetear a escondidas al perfecto; de improviso lo asaetean, y no temen
5
Se afirman a sí mismos la palabra mala, tratan de esconder los lazos, y dicen: ¿Quién los ha de ver
6
Escudriñan iniquidades, perfeccionan y ponen en efecto lo que inventaron en lo íntimo de cada uno, y en su corazón inventivo
7
Mas Dios los herirá con saeta; de repente serán sus plagas
8
Y harán caer sobre sí sus mismos consejos y acuerdos; se espantarán todos los que los vieren
9
Y temerán todos los hombres, y anunciarán la obra de Dios, y entenderán su obra
10
El justo se alegrará en el SEÑOR, y se asegurará en él; y se alabarán en El todos los rectos de corazón