4Has dado un estandarte a los que te temen, para que sea alzado por causa de la verdad. (Selah)5Para que sean librados tus amados, salva con tu diestra, y respóndeme.6Dios ha hablado en su santidad : Me alegraré, repartiré a Siquem, y mediré el valle de Sucot.7Mío es Galaad, mío es Manasés, Efraín es el yelmo de mi cabeza, Judá es mi cetro .8Moab es la vasija en que me lavo; sobre Edom arrojaré mi zapato; clama a gritos, oh Filistea, a causa de mí.9¿Quién me conducirá a la ciudad fortificada? ¿Quién me guiará hasta Edom?10¿No eres tú, oh Dios, el que nos ha rechazado? ¿No saldrás, oh Dios, con nuestros ejércitos?11Danos ayuda contra el adversario, pues vano es el auxilio del hombre.12En Dios haremos proezas, y El hollará a nuestros adversarios.
1Oye, oh Dios, mi clamor; atiende a mi oración.2Desde los confines de la tierra te invoco, cuando mi corazón desmaya. Condúceme a la roca que es más alta que yo.3Porque tú has sido refugio para mí, torre fuerte frente al enemigo.4Que more yo en tu tienda para siempre; y me abrigue en el refugio de tus alas. (Selah)5Porque tú, oh Dios, has escuchado mis votos; tú me has dado la heredad de los que temen tu nombre.6Tú añadirás días a los días del rey; sus años serán como muchas generaciones.7El reinará para siempre delante de Dios; concédele misericordia y verdad para que lo guarden.8Así cantaré alabanzas a tu nombre para siempre, cumpliendo mis votos día tras día.
1En Dios solamente espera en silencio mi alma; de El viene mi salvación.2Sólo El es mi roca y mi salvación, mi baluarte, nunca seré sacudido.3¿Hasta cuándo atacaréis a un hombre, vosotros todos, para derribarlo, como pared inclinada, como cerca que se tambalea?4Solamente consultan para derribarlo de su eminencia; en la falsedad se deleitan; bendicen con la boca, pero por dentro maldicen. (Selah)5Alma mía, espera en silencio solamente en Dios, pues de El viene mi esperanza.6Sólo El es mi roca y mi salvación, mi refugio, nunca seré sacudido.7En Dios descansan mi salvación y mi gloria; la roca de mi fortaleza, mi refugio, está en Dios.8Confiad en El en todo tiempo, oh pueblo; derramad vuestro corazón delante de El; Dios es nuestro refugio. (Selah)9Los hombres de baja condición sólo son vanidad, y los de alto rango son mentira; en la balanza suben, todos juntos pesan menos que un soplo.10No confiéis en la opresión, ni en el robo pongáis vuestra esperanza; si las riquezas aumentan, no pongáis el corazón en ellas.11Una vez ha hablado Dios; dos veces he oído esto : Que de Dios es el poder;12y tuya es, oh Señor, la misericordia, pues tú pagas al hombre conforme a sus obras.
1Oh Dios, tú eres mi Dios; te buscaré con afán . Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela cual tierra seca y árida donde no hay agua.2Así te contemplaba en el santuario, para ver tu poder y tu gloria.3Porque tu misericordia es mejor que la vida, mis labios te alabarán.4Así te bendeciré mientras viva, en tu nombre alzaré mis manos.5Como con médula y grosura está saciada mi alma; y con labios jubilosos te alaba mi boca.6Cuando en mi lecho me acuerdo de ti, en ti medito durante las vigilias de la noche.7Porque tú has sido mi socorro, y a la sombra de tus alas canto gozoso.8A ti se aferra mi alma; tu diestra me sostiene.9Pero los que buscan mi vida para destruirla, caerán a las profundidades de la tierra.10Serán entregados al poder de la espada; presa serán de las zorras.11Mas el rey se regocijará en Dios; y todo el que por El jura se gloriará, porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada.
1Escucha mi voz, oh Dios, en mi queja ; guarda mi vida del terror del enemigo.2Escóndeme de los planes secretos de los malhechores, del asalto de los obradores de iniquidad,3que afilan su lengua como espada, y lanzan palabras amargas como saeta,4para herir en oculto al íntegro; lo hieren repentinamente, y no temen.5Se aferran en propósitos malignos; hablan de tender trampas en secreto, y dicen: ¿Quién las verá?6Traman injusticias, diciendo: Estamos listos con una trama bien concebida; pues los pensamientos del hombre y su corazón son profundos .7Pero Dios les disparará con saeta; repentinamente serán heridos.8Vuelven su lengua tropezadero contra sí mismos; todos los que los vean menearán la cabeza.9Entonces todos los hombres temerán, y declararán la obra de Dios, y considerarán sus hechos.10El justo se alegrará en el SEÑOR, y en El se refugiará; y todos los rectos de corazón se gloriarán.
1Silencio habrá delante de ti, y alabanza en Sion, oh Dios; y a ti se cumplirá el voto.2¡Oh tú, que escuchas la oración! Hasta ti viene todo hombre .3Las iniquidades prevalecen contra mí; mas nuestras transgresiones tú las perdonas.4Cuán bienaventurado es el que tú escoges, y acercas a ti, para que more en tus atrios. Seremos saciados con el bien de tu casa, tu santo templo.5Con grandes prodigios nos respondes en justicia, oh Dios de nuestra salvación, confianza de todos los términos de la tierra, y del más lejano mar;6tú, el que afirma los montes con su poder, ceñido de potencia;7el que calma el rugido de los mares, el estruendo de las olas, y el tumulto de los pueblos.8Por eso los que moran en los confines de la tierra temen tus obras, tú haces cantar de júbilo a la aurora y al ocaso.9Tú visitas la tierra y la riegas en abundancia, en gran manera la enriqueces; el río de Dios rebosa de agua; tú les preparas su grano, porque así preparas la tierra.