77
Vengan á mí tus misericordias, y viva; Porque tu ley es mi deleite.
78
Sean avergonzados los soberbios, porque sin causa me han calumniado: Yo empero, meditaré en tus mandamientos.
79
Tórnense á mí los que te temen Y conocen tus testimonios.
80
Sea mi corazón íntegro en tus estatutos; Porque no sea yo avergonzado.
81
KAF. Desfallece mi alma por tu salud, Esperando en tu palabra.
82
Desfallecieron mis ojos por tu palabra, Diciendo: ¿Cuándo me consolarás?
83
Porque estoy como el odre al humo; Mas no he olvidado tus estatutos.
84
¿Cuántos son los días de tu siervo? ¿Cuándo harás juicio contra los que me persiguen?
85
Los soberbios me han cavado hoyos; Mas no obran según tu ley.
86
Todos tus mandamientos son verdad: Sin causa me persiguen; ayúdame.
87
Casi me han echado por tierra: Mas yo no he dejado tus mandamientos.
88
Vivifícame conforme á tu misericordia; Y guardaré los testimonios de tu boca.
89
LAMED. Para siempre, oh Jehová, Permenece tu palabra en los cielos.
90
Por generación y generación es tu verdad: Tú afirmaste la tierra, y persevera.
91
Por tu ordenación perseveran hasta hoy las cosas criadas; Porque todas ellas te sirven.
92
Si tu ley no hubiese sido mis delicias, Ya en mi aflicción hubiera perecido.
93
Nunca jamás me olvidaré de tus mandamientos; Porque con ellos me has vivificado.
94
Tuyo soy yo, guárdame; Porque he buscado tus mandamientos.
95
Los impíos me han aguardado para destruirme: Mas yo entenderé en tus testimonios.
96
A toda perfección he visto fin: Ancho sobremanera es tu mandamiento.
97
MEM. ¡Cuánto amo yo tu ley! Todo el día es ella mi meditación.