75
Conozco, oh SEÑOR, que tus juicios son la misma justicia, y que en fidelidad me afligiste
76
Sea ahora tu misericordia para consolarme, conforme a lo que has dicho a tu siervo
77
Vengan a mí tus misericordias, y viva; porque tu ley es mi deleite
78
Sean avergonzados los soberbios, porque sin causa me han calumniado; pero yo, meditaré en tus mandamientos
79
Tórnense a mí los que te temen y conocen tus testimonios
80
Sea mi corazón perfecto en tus estatutos; para que no sea yo avergonzado
81
CAF Desfalleció de deseo mi alma por tu salvación, esperando a tu palabra
82
Desfallecieron mis ojos por tu dicho, diciendo: ¿Cuándo me consolarás
83
Porque estoy como el odre al humo; mas no he olvidado tus estatutos
84
¿Cuántos son los días de tu siervo? ¿Cuándo harás juicio contra los que me persiguen
85
Los soberbios me han cavado hoyos; mas no obran según tu ley