34
la tierra fructífera en salados; por la maldad de los que la habitan.
35
Vuelve el desierto en estanques de aguas, y la tierra desierta en manaderos de agua.
36
Y aposenta allí hambrientos, y aderezan allí ciudad para habitación;
37
y siembran campos, y plantan viñas; y rinden fruto de aumento.
38
Y los bendice, y se multiplican en gran manera; y no disminuye sus bestias.
39
Y después son menoscabados, y abatidos de tiranía; de males y congojas.
40
El derrama menosprecio sobre los príncipes, y les hace andar errados, vagabundos, sin camino.
41
Y levanta al pobre de la pobreza, y vuelve las familias como ovejas.
42
Vean los rectos, y alégrense; y toda maldad cierre su boca.
43
¿Quién es sabio y guardará estas cosas, y entenderá las misericordias del SEÑOR?