8
Los salvó por su Nombre, para hacer notoria su fortaleza.
9
Y reprendió al mar Bermejo, y lo secó; y les hizo ir por el abismo, como por un desierto.
10
Y los salvó de mano del enemigo, y los rescató de mano del adversario.
11
Y cubrieron las aguas a sus enemigos; no quedó uno de ellos.
12
Entonces creyeron a sus palabras, y cantaron su alabanza.
13
Se apresuraron, se olvidaron de sus obras; no esperaron en su consejo.
14
Se entregaron a un deseo desordenado en el desierto; y tentaron a Dios en la soledad.
15
Y él les dio lo que pidieron; mas envió flaqueza en sus almas.
16
Tomaron después celo contra Moisés en el campamento, y contra Aarón el santo del SEÑOR.
17
Se abrió la tierra, y tragó a Datán, y cubrió la compañía de Abiram.
18
Y se encendió el fuego en su compañía; la llama quemó los impíos.