11
Mis días son como la sombra que se va; y me he secado como la hierba.
12
Mas tú, SEÑOR, para siempre permanecerás, y tu memoria para generación y generación.
13
Tú levantándote, tendrás misericordia de Sion; porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo es llegado .
14
Porque tus siervos amaron sus piedras, y del polvo de ella tuvieron compasión.
15
Entonces temerán los gentiles el Nombre del SEÑOR, y todos los reyes de la tierra tu gloria;
16
por cuanto el SEÑOR habrá edificado a Sion, y será visto en su gloria;
17
habrá mirado a la oración de los solitarios y menesterosos , y no habrá desechado el ruego de ellos.
18
Se escribirá esto para la generación venidera; y el pueblo que se criará, alabará a JAH.
19
Porque miró de lo alto de su santuario; el SEÑOR miró de los cielos a la tierra,
20
para oír el gemido de los presos, para soltar a los hijos de muerte;
21
para que cuenten en Sion el Nombre del SEÑOR, y su alabanza en Jerusalén,