5
Entonces replicó Booz: El mismo día que tomares las tierras de mano de Noemi, has de tomar también á Ruth Moabita, mujer del difunto, para que suscites el nombre del muerto sobre su posesión.
6
Y respondió el pariente: No puedo redimir por mi parte, porque echaría á perder mi heredad: redime tú usando de mi derecho, porque yo no podré redimir.
7
Había ya de largo tiempo esta costumbre en Israel en la redención ó contrato, que para la confirmación de cualquier negocio, el uno se quitaba el zapato y lo daba á su compañero: y este era el testimonio en Israel.
8
Entonces el pariente dijo á Booz: Tómalo tú. Y descalzó su zapato.
9
Y Booz dijo á los ancianos y á todo el pueblo: Vosotros sois hoy testigos de que tomo todas las cosas que fueron de Elimelech, y todo lo que fué de Chelión y de Mahalón, de mano de Noemi.
10
Y que también tomo por mi mujer á Ruth Moabita, mujer de Mahalón, para suscitar el nombre del difunto sobre su heredad, para que el nombre del muerto no se borre de entre sus hermanos y de la puerta de su lugar. Vosotros sois hoy testigos.
11
Y dijeron todos los del pueblo que estaban á la puerta con los ancianos: Testigos somos. Jehová haga á la mujer que entra en tu casa como á Rachêl y á Lea, las cuales dos edificaron la casa de Israel; y tú seas ilustre en Ephrata, y tengas nombradía en Beth-lehem;
12
Y de la simiente que Jehová te diere de aquesta moza, sea tu casa como la casa de Phares, al que parió Thamar á Judá.
13
Booz pues tomó á Ruth, y ella fué su mujer; y luego que entró á ella, Jehová le dió que concibiese y pariese un hijo.
14
Y las mujeres decían á Noemi: Loado sea Jehová, que hizo que no te faltase hoy pariente, cuyo nombre será nombrado en Israel.
15
El cual será restaurador de tu alma, y el que sustentará tu vejez; pues que tu nuera, la cual te ama y te vale más que siete hijos, le ha parido.