5 Escápate como la gacela de la mano del cazador , y como el ave de la mano del parancero.
6 Ve a la hormiga, oh perezoso, mira sus caminos, y sé sabio;
7 la cual no teniendo capitán, ni gobernador, ni señor,
8 prepara en el verano su comida y en el tiempo de la siega allega su mantenimiento.
9 Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño?
10 Tomando un poco de sueño, cabeceando otro poco, y cruzado los brazos otro poco para volver a dormir;
11 así vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre de escudo.
12 El hombre perverso es varón inicuo, anda en perversidad de boca;
13 guiña con sus ojos, habla con sus pies, enseña con sus dedos;
14 perversidades hay en su corazón, anda pensando mal en todo tiempo; enciende rencillas.
15 Por tanto su calamidad vendrá de repente; súbitamente será quebrantado, y no habrá remedio.
16 Seis cosas aborrece el SEÑOR, y aun siete abomina su alma:
17 Los ojos altivos, la lengua mentirosa, las manos derramadoras de sangre inocente,
18 el corazón que maquina pensamientos inicuos, los pies presurosos para correr al mal,
19 el testigo falso que habla mentiras, y el que enciende rencillas entre los hermanos.
20 Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre, y no dejes la ley de tu madre;
21 átala siempre en tu corazón, enlázala a tu cuello.
22 Te guiará cuando anduvieres; cuando durmieres te guardará; hablará contigo cuando despertares.
23 Porque el mandamiento es candela, y la enseñanza luz; y camino de vida las reprensiones del castigo;
24 para que te guarden de la mala mujer, de la blandura de la lengua de la extraña.
25 No codicies su hermosura en tu corazón, ni ella te prenda con sus ojos;
26 porque a causa de la mujer ramera es reducido el hombre a un bocado de pan; y la mujer caza la preciosa alma del varón.
27 ¿Tomará el hombre fuego en su seno, sin que sus vestidos se quemen?
28 ¿Andará el hombre sobre las brasas, sin que sus pies se quemen?
29 Así el que entrare a la mujer de su prójimo; no será sin culpa cualquiera que la tocare.
30 No tienen en poco al ladrón, aún cuando hurtare para saciar su alma teniendo hambre;
31 tomado, paga siete veces; da toda la sustancia de su casa.
32 Mas el que comete adulterio con la mujer, es falto de corazón; corrompe su alma el que tal hace.
33 Plaga y vergüenza hallará; y su afrenta nunca será raída.
34 Porque el celo sañudo del varón no perdonará en el día de la venganza;
35 no tendrá respeto a ninguna redención; ni querrá perdonar, aunque multipliques el cohecho.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Proverbios 6:5 líbrate como la gacela de la mano del cazador, y como ave de la mano del que caza.

English Standard Version ESV

Proverbs 6:5 save yourself like a gazelle from the hand of the hunter, like a bird from the hand of the fowler.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Proverbios 6:5 Escápate como la gacela de la mano del cazador, y como el ave de la mano del que tiende trampas

King James Version KJV

Proverbs 6:5 Deliver thyself as a roe from the hand of the hunter, and as a bird from the hand of the fowler.

New King James Version NKJV

Proverbs 6:5 Deliver yourself like a gazelle from the hand of the hunter, And like a bird from the hand of the fowler.

Nueva Traducción Viviente NTV

Proverbios 6:5 Sálvate como una gacela que escapa del cazador,
como un pájaro que huye de la red.

Nueva Versión Internacional NVI

Proverbios 6:5 Líbrate, como se libra del cazador la gacela,como se libra de la trampa el ave.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Proverbios 6:5 Escápate como el corzo de la mano del cazador, Y como el ave de la mano del parancero.

Herramientas de Estudio para Proverbios 6:5-35