7 El principio del conocimiento es el temor del SEÑOR; los locos despreciaron la sabiduría y el castigo.
8 Oye, hijo mío, el castigo de tu padre, y no deseches la ley de tu madre;
9 porque aumento de gracia serán a tu cabeza, y protección a tu cuello.
10 Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, no consientas.
11 Si dijeren: Ven con nosotros, espiemos a alguno para matarle, acechemos al inocente sin razón;
12 los tragaremos vivos como el sepulcro, y enteros, como los que caen en un abismo;
13 hallaremos riquezas de toda clase, llenaremos nuestras casas de despojos;
14 echa tu suerte entre nosotros; tengamos todos una bolsa,
15 hijo mío, no andes en camino con ellos; aparta tu pie de sus veredas;
16 porque sus pies correrán al mal, e irán presurosos a derramar sangre.
17 Porque en vano se tenderá la red ante los ojos de toda ave;
18 mas ellos a su propia sangre espían, y a sus propias almas ponen asechanza.
19 Tales son las sendas de todo el que codicia la ganancia, la cual prenderá la vida de sus poseedores.
20 La sabiduría clama de fuera; en las plazas da su voz;
21 clama en los principales lugares de concurso; en las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones:
22 ¿Hasta cuándo, oh simples, amaréis la simpleza, y los burladores desearán el burlar, y los locos aborrecerán la ciencia?
23 Volveos a mi reprensión; he aquí yo os derramaré mi espíritu, y os haré saber mis palabras.
24 Por cuanto llamé, y no quisisteis; extendí mi mano, y no hubo quien escuchase;
25 antes desechasteis todo consejo mío, y no quisisteis mi reprensión;
26 también yo me reiré en vuestra calamidad, y me burlaré cuando os viniere lo que teméis;
27 cuando viniere como una destrucción lo que teméis, y vuestra calamidad llegare como un torbellino; cuando sobre vosotros viniere tribulación y angustia.
28 Entonces me llamarán, y no responderé; me buscarán de mañana, y no me hallarán;
29 por cuanto aborrecieron el conocimiento, y no escogieron el temor del SEÑOR,
30 ni quisieron mi consejo, y menospreciaron toda reprensión mía.
31 Comerán, pues, del fruto de su camino, y de sus consejos se hartarán.
32 Porque el reposo de los ignorantes los matará, y la prosperidad de los locos los echará a perder.
33 Mas el que me oyere, habitará confiadamente, y vivirá reposado del temor del mal.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Proverbios 1:7 El temor del SEÑOR es el principio de la sabiduría; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.

English Standard Version ESV

Proverbs 1:7 1The fear of the LORD is the beginning of knowledge; fools despise wisdom and instruction.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Proverbios 1:7 El principio del conocimiento es el temor del SEÑOR; los locos despreciaron la sabiduría y el castigo

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Proverbs 1:7 The fear of the Lord is the beginning of knowledge, But fools despise wisdom and instruction.

Nueva Traducción Viviente NTV

Proverbios 1:7 El temor del Señor
es la base del verdadero conocimiento,
pero los necios desprecian la sabiduría y la disciplina.

Nueva Versión Internacional NVI

Proverbios 1:7 El temor del SEÑOR es el principio del conocimiento;los necios desprecian la sabiduría y la disciplina.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Proverbios 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová: Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.

Herramientas de Estudio para Proverbios 1:7-33