8
Pues ella no sabía que era yo el que le daba el trigo, el mosto y el aceite, y le prodigaba la plata y el oro, que ellos usaban para Baal.
9
Por tanto, volveré a tomar mi trigo a su tiempo y mi mosto a su sazón. También me llevaré mi lana y mi lino que le di para que cubriera su desnudez.
10
Y ahora descubriré su verguenza ante los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano.
11
Haré cesar también todo su regocijo, sus fiestas, sus lunas nuevas, sus días de reposo, y todas sus solemnidades.
12
Devastaré sus vides y sus higueras, de las cuales decía ella: "Son la paga que mis amantes me han dado." Y las convertiré en matorral, y las devorarán las bestias del campo.
13
Y la castigaré por los días de los Baales cuando ella les ofrecía sacrificios y se adornaba con sus zarcillos y joyas, y se iba tras sus amantes, y se olvidaba de mídeclara el SEÑOR.
14
Por tanto, he aquí, la seduciré, la llevaré al desierto, y le hablaré al corazón.
15
Le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza. Y allí cantará como en los días de su juventud, como en el día en que subió de la tierra de Egipto.
16
Sucederá en aquel díadeclara el SEÑOR que me llamarás Ishí y no me llamarás más Baalí .
17
Porque quitaré de su boca los nombres de los Baales, y nunca más serán mencionados por sus nombres.
18
En aquel día haré también un pacto por ellos con las bestias del campo, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra; quitaré de la tierra el arco, la espada y la guerra, y haré que ellos duerman seguros.