1
Vuélvete, Israel, al SEÑOR tu Dios.¡Tu perversidad te ha hecho caer!
2
Piensa bien lo que le dirás,y vuélvete al SEÑOR con este ruego:«Perdónanos nuestra perversidad,y recíbenos con benevolencia,pues queremos ofrecerteel fruto de nuestros labios.
3
Asiria no podrá salvarnos;no montaremos caballos de guerra.Nunca más llamaremos “dios nuestro”a cosas hechas por nuestras manos,pues en ti el huérfano halla compasión».