25
Y partidos de Harada, asentaron en Macelot.
26
Y partidos de Macelot, asentaron en Tahat.
27
Y partidos de Tahat, asentaron en Tara.
28
Y partidos de Tara, asentaron en Mitca.
29
Y partidos de Mitca, asentaron en Hasmona.
30
Y partidos de Hasmona, asentaron en Moserot.
31
Y partidos de Moserot, asentaron en Bene-jaacán.
32
Y partidos de Bene-jaacán, asentaron en el monte de Gidgad.
33
Y partidos del monte de Gidgad, asentaron en Jotbata.
34
Y partidos de Jotbata, asentaron en Abrona.
35
Y partidos de Abrona, asentaron en Ezión-geber.
36
Y partidos de Ezión-geber, asentaron en el desierto de Zin, que es Cades.
37
Y partidos de Cades, asentaron en el monte de Hor, en la extremidad de la tierra de Edom.
38
Y subió Aarón el sacerdote al monte de Hor, conforme al dicho del SEÑOR, y allí murió a los cuarenta años de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, en el mes quinto, en el primero del mes.
39
Y era Aarón de edad de ciento veintitrés años, cuando murió en el monte de Hor.
40
Y el cananeo, rey de Arad, que habitaba al mediodía en la tierra de Canaán, oyó como habían entrado los hijos de Israel.
41
Y partidos del monte de Hor, asentaron en Zalmona.
42
Y partidos de Zalmona, asentaron en Punón.
43
Y partidos de Punón, asentaron en Obot.
44
Y partidos de Obot, asentaron en Ije-abarim; en el término de Moab.
45
Y partidos de Ije-abarim, asentaron en Dibón-gad.
46
Y partidos de Dibón-gad, asentaron en Almón-diblataim.
47
Y partidos de Almón-diblataim, asentaron en los montes de Abarim, delante de Nebo.
48
Y partidos de los montes de Abarim, asentaron en los campos de Moab, junto al Jordán de Jericó.
49
Finalmente asentaron junto al Jordán, desde Bet-jesimot hasta Abel-sitim, en los campos de Moab.
50
Y habló el SEÑOR a Moisés en los campos de Moab junto al Jordán de Jericó, diciendo:
51
Habla a los hijos de Israel, y diles: Cuando hubiereis pasado el Jordán a la tierra de Canaán,
52
echaréis a todos los moradores de la tierra de delante de vosotros, y destruiréis todas sus pinturas, y todas sus imágenes de fundición destruiréis, y destruiréis todos sus altos;
53
y echaréis a los moradores de la tierra, y habitaréis en ella; porque yo os la he dado para que la heredéis.
54
Y heredaréis la tierra por suertes por vuestras familias; al mucho daréis mucho por su heredad, y al poco daréis poco por su heredad; donde le saliere la suerte, allí la tendrá; por las tribus de vuestros padres heredaréis.
55
Y si no echareis a los moradores de la tierra de delante de vosotros, sucederá que los que dejareis de ellos serán por aguijones en vuestros ojos, y por espinas en vuestros costados, y os afligirán sobre la tierra en que vosotros habitareis.