37
aquellos varones que habían hablado mal de la tierra, murieron de plaga delante del SEÑOR.
38
Mas Josué hijo de Nun, y Caleb hijo de Jefone, quedaron con vida de entre aquellos hombres que habían ido a reconocer la tierra.
39
Y Moisés dijo estas cosas a todos los hijos de Israel, y el pueblo se enlutó mucho.
40
Y se levantaron por la mañana, y subieron a la cumbre del monte, diciendo: Henos aquí preparados para subir al lugar del cual ha hablado el SEÑOR; porque hemos pecado.
41
Y dijo Moisés: ¿Por qué quebrantáis el dicho del SEÑOR? Esto tampoco os sucederá bien.
42
No subáis, porque el SEÑOR no está en medio de vosotros, no seáis heridos delante de vuestros enemigos.
43
Porque el amalecita y el cananeo están allí delante de vosotros, y caeréis a cuchillo; pues por cuanto os habéis retraído de seguir al SEÑOR, también el SEÑOR no está con vosotros.
44
Sin embargo, se esforzaron a subir a la cima del monte; pero el arca del pacto del SEÑOR, y Moisés, no se apartaron de en medio del campamento.
45
Y descendieron el amalecita y el cananeo, que habitaban en aquel monte, y los hirieron y los derrotaron, persiguiéndolos hasta Horma.