4 para que tu limosna sea en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará .
5 Y cuando oréis, no seáis como los hipócritas; porque a ellos les gusta ponerse en pie y orar en las sinagogas y en las esquinas de las calles, para ser vistos por los hombres. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa.
6 Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
7 Y al orar, no uséis repeticiones sin sentido, como los gentiles, porque ellos se imaginan que serán oídos por su palabrería.
8 Por tanto, no os hagáis semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe lo que necesitáis antes que vosotros le pidáis.
9 Vosotros, pues, orad de esta manera: "Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
10 "Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo.
11 "Danos hoy el pan nuestro de cada día.
12 "Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores.
13 "Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén."
14 Porque si perdonáis a los hombres sus transgresiones, también vuestro Padre celestial os perdonará a vosotros.
15 Pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras transgresiones.
16 Y cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas; porque ellos desfiguran sus rostros para mostrar a los hombres que están ayunando. En verdad os digo que ya han recibido su recompensa.
17 Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro,
18 para no hacer ver a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.
19 No os acumuléis tesoros en la tierra, donde la polilla y la herrumbre destruyen, y donde ladrones penetran y roban;
20 sino acumulaos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la herrumbre destruyen, y donde ladrones no penetran ni roban;
21 porque donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón.
22 La lámpara del cuerpo es el ojo; por eso, si tu ojo está sano, todo tu cuerpo estará lleno de luz.
23 Pero si tu ojo está malo, todo tu cuerpo estará lleno de oscuridad. Así que, si la luz que hay en ti es oscuridad, ¡cuán grande no será la oscuridad!
24 Nadie puede servir a dos señores; porque o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas .

English Standard Version ESV

Matthew 6:4 so that your giving may be in secret. And your Father who sees in secret will reward you.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 6:4 para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en secreto, él te pagará en público

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Matthew 6:4 that your charitable deed may be in secret; and your Father who sees in secret will Himself reward you openly.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 6:4 Entrega tu ayuda en privado, y tu Padre, quien todo lo ve, te recompensará.

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 6:4 para que tu limosna sea en secreto. Así tu Padre, que ve lo que se hace en secreto, te recompensará.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 6:4 Para que sea tu limosna en secreto: y tu Padre que ve en secreto, él te recompensará en público.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Mateo 6:4 para que sea tu limosna en secreto; y tu Padre que ve en secreto, él te pagará en público.

Herramientas de Estudio para Mateo 6:4-24