13 Entonces dijo a aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y fue restituida sana como la otra.
14 Y salidos los fariseos, tuvieron consejo contra él para destruirle.
15 Mas sabiéndolo Jesús, se apartó de allí; y le siguieron grandes multitudes, y sanaba a todos.
16 Y él les encargaba rigurosamente que no le descubriesen;
17 para que se cumpliese lo que estaba dicho por el profeta Isaías, que dijo:
18 He aquí mi siervo, al cual he escogido; mi Amado, en el cual se agrada mi alma; pondré mi Espíritu sobre él y a los gentiles anunciará juicio.
19 No contenderá, ni voceará; ni nadie oirá en las calles su voz.
20 La caña cascada no quebrará, y el pábilo que humea no apagará, hasta que saque a victoria el juicio.
21 Y en su Nombre esperarán los gentiles.
22 Entonces fue traído a él un endemoniado, ciego y mudo, y le sanó; de tal manera, que el ciego y mudo hablaba y veía.
23 Y las multitudes estaban fuera de sí, y decían: ¿Es éste aquel Hijo de David?
24 Mas los Fariseos, oyéndolo, decían: Este no echa fuera los demonios, sino por Beelzebú, príncipe de los demonios.
25 Y Jesús, como sabía los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es desolado; y toda ciudad o casa dividida contra sí misma, no permanecerá.
26 Y si Satanás echa fuera a Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, permanecerá su reino?
27 Y si yo por Beelzebú echo fuera los demonios, ¿vuestros hijos por quién los echan? Por tanto, ellos serán vuestros jueces.
28 Y si por el Espíritu de Dios yo echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el Reino de Dios.
29 Porque, ¿cómo puede alguno entrar en la casa del hombre fuerte, y saquear sus alhajas, si primero no prendiere al hombre fuerte; y entonces saqueará su casa?
30 El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no coge, derrama.
31 Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no será perdonada a los hombres.
32 Y cualquiera que hablare contra el Hijo del hombre, le será perdonado; mas cualquiera que hablare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo, ni en el venidero.
33 O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol podrido, y su fruto podrido; porque por el fruto es conocido el árbol.
34 Generación de víboras, ¿cómo podéis hablar bien, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.
35 El hombre bueno del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo del mal tesoro saca malas cosas.
36 Mas yo os digo, que toda palabra ociosa que hablaren los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio;
37 porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.
38 Entonces respondiendo algunos de los escribas y de los fariseos, diciendo: Maestro, deseamos ver de ti señal.
39 Y él respondió, y les dijo: La generación mala y adúltera demanda señal; mas señal no le será dada, sino la señal de Jonás profeta.
40 Porque como estuvo Jonás en el vientre de la ballena tres días y tres noches, así estará el Hijo del hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches.
41 Los hombres de Nínive se levantarán en el juicio con esta generación, y la condenarán; porque ellos se arrepintieron a la predicación de Jonás; y he aquí más que Jonás en este lugar.
42 La reina del austro se levantará en el juicio con esta generación, y la condenará; porque vino de los fines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón; y he aquí más que Salomón en este lugar.
43 Cuando el espíritu inmundo ha salido del hombre, anda por lugares secos, buscando reposo, y no lo halla.
44 Entonces dice: Me volveré a mi casa de donde salí; y cuando viene, la halla desocupada, barrida y adornada.
45 Entonces va, y toma consigo otros siete espíritus peores que él, y entrados, moran allí; y son peores las postrimerías del tal hombre que las primeras. Así también acontecerá a esta generación mala.
46 Y estando él aún hablando a la multitud, he aquí su madre y sus hermanos estaban fuera, que le querían hablar.
47 Y le dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están fuera, que te quieren hablar.
48 Y respondiendo él al que le decía esto , dijo: ¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?
49 Y extendiendo su mano hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos.
50 Porque todo aquel que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ese es mi hermano, y hermana, y madre.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Mateo 12:13 Entonces dijo<***> al hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y le fue restaurada, sana como la otra.

English Standard Version ESV

Matthew 12:13 Then he said to the man, "Stretch out your hand." And the man stretched it out, and it was restored, healthy like the other.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 12:13 Entonces dijo a aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y fue restituida sana como la otra

King James Version KJV

Matthew 12:13 Then saith he to the man, Stretch forth thine hand. And he stretched it forth; and it was restored whole, like as the other.

New King James Version NKJV

Matthew 12:13 Then He said to the man, "Stretch out your hand." And he stretched it out, and it was restored as whole as the other.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 12:13 Después le dijo al hombre:
Entonces el hombre la extendió, y la mano quedó restaurada, ¡igual que la otra!

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 12:13 Entonces le dijo al hombre:—Extiende la mano.Así que la extendió y le quedó restablecida, tan sana como la otra.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 12:13 Entonces dijo á aquel hombre: Extiende tu mano. Y él la extendió, y fué restituída sana como la otra.

Herramientas de Estudio para Mateo 12:13-50