5 los CIEGOS RECIBEN LA VISTA y los cojos andan, los leprosos quedan limpios, los sordos oyen, los muertos son resucitados y a los POBRES SE LES ANUNCIA EL EVANGELIO.
6 Y bienaventurado es el que no se escandaliza de mí.
7 Mientras ellos se marchaban, Jesús comenzó a hablar a las multitudes acerca de Juan: ¿Qué salisteis a ver en el desierto? ¿Una caña sacudida por el viento?
8 Mas, ¿qué salisteis a ver? ¿Un hombre vestido con ropas finas? Mirad, los que usan ropas finas están en los palacios de los reyes.
9 Pero, ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y uno que es más que un profeta.
10 Este es de quien está escrito: "HE AQUI, YO ENVIO MI MENSAJERO DELANTE DE TU FAZ, QUIEN PREPARARA TU CAMINO DELANTE DE TI."
11 En verdad os digo que entre los nacidos de mujer no se ha levantado nadie mayor que Juan el Bautista; sin embargo, el más pequeño en el reino de los cielos es mayor que él.
12 Y desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo conquistan por la fuerza.
13 Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan.
14 Y si queréis aceptarlo, él es Elías, el que había de venir.
15 El que tiene oídos, que oiga.
16 Pero, ¿con qué compararé a esta generación? Es semejante a los muchachos que se sientan en las plazas, que dan voces a los otros,
17 y dicen: "Os tocamos la flauta, y no bailasteis; entonamos endechas, y no os lamentasteis."
18 Porque vino Juan que no comía ni bebía, y dicen: "Tiene un demonio."
19 Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: "Mirad, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores." Pero la sabiduría se justifica por sus hechos .
20 Entonces comenzó a increpar a las ciudades en las que había hecho la mayoría de sus milagros, porque no se habían arrepentido.
21 ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si los milagros que se hicieron en vosotras se hubieran hecho en Tiro y en Sidón, hace tiempo que se hubieran arrepentido en cilicio y ceniza.
22 Por eso os digo que en el día del juicio será más tolerable el castigo para Tiro y Sidón que para vosotras.
23 Y tú, Capernaúm, ¿acaso serás elevada hasta los cielos? ¡Hasta el Hades descenderás! Porque si los milagros que se hicieron en ti se hubieran hecho en Sodoma, ésta hubiera permanecido hasta hoy.
24 Sin embargo, os digo que en el día del juicio será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma que para ti.
25 En aquel tiempo, hablando Jesús, dijo: Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque ocultaste estas cosas a sabios e inteligentes, y las revelaste a los niños.
26 Sí, Padre, porque así fue de tu agrado.
27 Todas las cosas me han sido entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
28 Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.
29 Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y HALLAREIS DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS.
30 Porque mi yugo es fácil y mi carga ligera.

English Standard Version ESV

Matthew 11:5 the blind receive their sight and the lame walk, lepers are cleansed and the deaf hear, and the dead are raised up, and the poor have good news preached to them.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 11:5 Los ciegos ven, y los cojos andan; los leprosos son limpiados, y los sordos oyen; los muertos son resucitados, y el evangelio es predicado a los pobres

King James Version KJV

Matthew 11:5 The blind receive their sight, and the lame walk, the lepers are cleansed, and the deaf hear, the dead are raised up, and the poor have the gospel preached to them.

New King James Version NKJV

Matthew 11:5 The blind see and the lame walk; the lepers are cleansed and the deaf hear; the dead are raised up and the poor have the gospel preached to them.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 11:5 los ciegos ven, los cojos caminan bien, los leprosos son curados, los sordos oyen, los muertos resucitan, y a los pobres se les predica la Buena Noticia.

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 11:5 Los ciegos ven, los cojos andan, los que tienen lepra son sanados, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncian las buenas nuevas.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 11:5 Los ciegos ven, y los cojos andan; los leprosos son limpiados, y los sordos oyen; los muertos son resucitados, y á los pobres es anunciado el evangelio.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Mateo 11:5 Los ciegos ven, y los cojos andan; los leprosos son limpiados, y los sordos oyen; los muertos son resucitados, y el evangelio es predicado a los pobres.

Herramientas de Estudio para Mateo 11:5-30