22
y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y fue hecha una voz del cielo que decía: TU eres mi Hijo amado, en ti es mi placer.
23
Y el mismo Jesús comenzaba a ser como de treinta años, hijo de José, como se creía; que fue hijo de Elí,
24
que fue de Matat, que fue de Leví, que fue de Melqui, que fue de Jana, que fue de José,
25
que fue de Matatías, que fue de Amós, que fue de Nahum, que fue de Esli,
26
que fue de Nagai, que fue de Maat, que fue de Matatías, que fue de Semei, que fue de José, que fue de Judá,
27
que fue de Joana, que fue de Resa, que fue de Zorobabel, que fue de Salatiel,
28
que fue de Neri, que fue de Melqui, que fue de Adi, que fue de Cosam, que fue de Elmodam, que fue de Er,
29
que fue de Josué, que fue de Eliezer, que fue de Jorim, que fue de Matat,
30
que fue de Leví, que fue de Simeón, que fue de Judá, que fue de José, que fue de Jonán, que fue de Eliaquim,
31
que fue de Melea, que fue de Mainán, que fue de Matata, que fue de Natán,
32
que fue de David, que fue de Jessé, que fue de Obed, que fue de Booz, que fue de Salmón, que fue de Naasón,