2 siendo sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino Palabra de Dios sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto.
3 Y él vino por toda la tierra alrededor del Jordán predicando el bautismo del arrepentimiento para la remisión de pecados;
4 como está escrito en el libro de las palabras del profeta Isaías que dice: Voz del que clama en el desierto: Aparejad el camino del Señor, Haced derechas sus sendas.
5 Todo valle se rellenará, y se bajará todo monte y collado; y los caminos torcidos serán enderezados, y los caminos ásperos allanados;
6 y verá toda carne la Salud de Dios.
7 Y decía a los de la multitud que salía para ser bautizados de él: ¡Oh generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira que vendrá?
8 Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento, y no comencéis a decir en vosotros mismos: Tenemos a Abraham por padre; porque os digo que puede Dios, aun de estas piedras, levantar hijos a Abraham.
9 Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; todo árbol pues que no hace buen fruto, es cortado, y echado en el fuego.
10 Y ellos le preguntaban, diciendo: ¿Pues qué haremos?
11 Y respondiendo, les dijo: El que tiene dos túnicas, dé al que no tiene; y el que tiene qué comer, haga lo mismo.
12 Y vinieron también publicanos para ser bautizados, y le dijeron: Maestro, ¿qué haremos?
13 Y él les dijo: No exijáis más de lo que os está ordenado.
14 Y le preguntaron también los soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué haremos? Y les dijo: No oprimáis, ni acusáis falsamente a nadie; y sed contentos con vuestros salarios.
15 Y estando el pueblo esperando, y pensando todos de Juan en sus corazones, si él fuese el Cristo,
16 respondió Juan, diciendo a todos: Yo, a la verdad, os bautizo en agua; mas viene quien es más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de sus zapatos; él os bautizará en Espíritu Santo y fuego;
17 su aventador está en su mano, y limpiará su era, y juntará el trigo en su alfolí, y la paja quemará en fuego que nunca se apagará.
18 Y amonestando, muchas otras cosas anunciaba el Evangelio al pueblo.
19 Entonces Herodes el tetrarca, siendo reprendido por él a causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano, y de todas las maldades que había hecho Herodes,
20 añadió también esto sobre todo, que encerró a Juan en la cárcel.
21 Y aconteció que, cuando todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fue bautizado; y orando, el cielo se abrió,
22 y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y fue hecha una voz del cielo que decía: TU eres mi Hijo amado, en ti es mi placer.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Lucas 3:2 durante el sumo sacerdocio de Anás y Caifás, vino la palabra de Dios a Juan, hijo de Zacarías, en el desierto.

English Standard Version ESV

Luke 3:2 during the high priesthood of Annas and Caiaphas, the word of God came to John the son of Zechariah in the wilderness.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Lucas 3:2 siendo sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino Palabra de Dios sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto

King James Version KJV

New King James Version NKJV

Luke 3:2 while Annas and Caiaphas were high priests, the word of God came to John the son of Zacharias in the wilderness.

Nueva Traducción Viviente NTV

Lucas 3:2 Anás y Caifás eran los sumos sacerdotes. En ese tiempo, un mensaje de Dios llegó a Juan, hijo de Zacarías, que vivía en el desierto.

Nueva Versión Internacional NVI

Lucas 3:2 el sumo sacerdocio lo ejercían Anás y Caifás. En aquel entonces, la palabra de Dios llegó a Juan hijo de Zacarías, en el desierto.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Lucas 3:2 Siendo sumos sacerdotes Anás y Caifás, vino palabra del Señor sobre Juan, hijo de Zacarías, en el desierto.

Herramientas de Estudio para Lucas 3:2-22