12
Y vinieron también publicanos para ser bautizados, y le dijeron: Maestro, ¿qué haremos?
13
Y él les dijo: No exijáis más de lo que os está ordenado.
14
Y le preguntaron también los soldados, diciendo: Y nosotros, ¿qué haremos? Y les dice: No hagáis extorsión á nadie, ni calumniéis; y contentaos con vuestras pagas.
15
Y estando el pueblo esperando, y pensando todos de Juan en sus corazones, si él fuese el Cristo,
16
Respondió Juan, diciendo á todos: Yo, á la verdad, os bautizo en agua; mas viene quien es más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de sus zapatos: él os bautizará en Espíritu Santo y fuego;
17
Cuyo bieldo está en su mano, y limpiará su era, y juntará el trigo en su alfolí, y la paja quemará en fuego que nunca se apagará.
18
Y amonestando, otras muchas cosas también anunciaba al pueblo.
19
Entonces Herodes el tetrarca, siendo reprendido por él á causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano, y de todas las maldades que había hecho Herodes,
20
Añadió también esto sobre todo, que encerró á Juan en la cárcel.
21
Y aconteció que, como todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fué bautizado; y orando, el cielo se abrió,
22
Y descendió el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como paloma, y fué hecha una voz del cielo que decía: Tú eres mi Hijo amado, en ti me he complacido.