44
Pues Abimelec y el escuadrón que estaba con él, acometieron con ímpetu, y se detuvieron a la entrada de la puerta de la ciudad; y las otras dos compañías acometieron a todos los que estaban en el campo, y los hirieron
45
Y después de combatir Abimelec la ciudad todo aquel día, la tomó, y mató al pueblo que en ella estaba, y asoló la ciudad, y la sembró de sal
46
Cuando oyeron esto todos los de la torre de Siquem, entraron en la fortaleza del templo del dios Berit
47
Y fue dicho a Abimelec como todos los de la torre de Siquem estaban reunidos
48
Entonces subió Abimelec al monte de Salmón, él y toda la gente que con él estaba; y tomó Abimelec un hacha en su mano, y cortó una rama de los árboles, y levantándola se la puso sobre sus hombros, diciendo al pueblo que estaba con él: Lo que me veis a mí que hago, hacedlo vosotros prestamente como yo
49
Y así todo el pueblo cortó también cada uno su rama, y siguieron a Abimelec, y las pusieron junto a la fortaleza, y prendieron fuego con ellas a la fortaleza; de manera que todos los de la torre de Siquem murieron, como unos mil hombres y mujeres
50
Después Abimelec se fue a Tebes; y puso cerco a Tebes, y la tomó
51
En medio de aquella ciudad había una torre fuerte, a la cual se retiraron todos los hombres y mujeres, y todos los señores de la ciudad; y cerrando tras sí las puertas, subieron al techo de la torre
52
Y vino Abimelec a la torre, y combatiéndola, llegó a la puerta de la torre para prenderle fuego
53
Mas una mujer dejó caer un pedazo de una rueda de molino sobre la cabeza de Abimelec, y le quebró el cráneo
54
Y luego él llamó a su escudero, y le dijo: Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió