15 Y el escaramujo respondió a los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, y aseguraos debajo de mi sombra; y si no, fuego salga del escaramujo que devore los cedros del Líbano
16 Ahora pues, si con verdad y con integridad habéis procedido en hacer rey a Abimelec, y si lo habéis hecho bien con Jerobaal y con su casa, y si le habéis pagado conforme a la obra de sus manos
17 (Pues que mi padre peleó por vosotros, y echó lejos su vida por libraros de la mano de Madián
18 y vosotros os levantasteis hoy contra la casa de mi padre, y matasteis a sus hijos, setenta varones, sobre una piedra; y habéis puesto por rey sobre los señores de Siquem a Abimelec, hijo de su criada, por cuanto es vuestro hermano)
19 si con verdad y con integridad habéis obrado hoy con Jerobaal y con su casa, que gocéis de Abimelec, y él goce de vosotros
20 Y si no, fuego salga de Abimelec, que consuma a los señores de Siquem y a la casa de Milo; y fuego salga de los de Siquem y de la casa de Milo, que consuma a Abimelec
21 Y huyó Jotam, se fugó, y se fue a Beer, y allí estuvo por causa de Abimelec su hermano
22 Y después que Abimelec hubo dominado sobre Israel tres años
23 envió Dios un espíritu malo entre Abimelec y los señores de Siquem; que los de Siquem se levantaron contra Abimelec
24 para que el agravio de los setenta hijos de Jerobaal, y la sangre de ellos, viniera a ponerse sobre Abimelec su hermano que los mató, y sobre los señores de Siquem que corroboraron las manos de él para matar a sus hermanos
25 Y los señores de Siquem le pusieron asechadores en las cumbres de los montes, los cuales robaban a todos los que pasaban junto a ellos por el camino; de esto fue dado aviso a Abimelec
26 Y Gaal hijo de Ebed vino con sus hermanos, y se pasaron a Siquem; y los señores de Siquem se confiaron en él
27 Y saliendo al campo, vendimiaron sus viñas, y pisaron la uva, e hicieron alegrías; y entrando en el templo de sus dioses, comieron y bebieron, y maldijeron a Abimelec
28 Y Gaal hijo de Ebed dijo: ¿Quién es Abimelec y qué es Siquem, para que nosotros le sirvamos a él? ¿No es hijo de Jerobaal? ¿Y no es Zebul su asistente? Servid a los varones de Hamor padre de Siquem. ¿Por qué habíamos de servirle a él
29 Fuérame dado este pueblo bajo mi mano, yo echaría luego a Abimelec. Y decía a Abimelec: Aumenta tu ejército, y sal
30 Y Zebul, príncipe de la ciudad, oyendo las palabras de Gaal hijo de Ebed, se encendió su ira
31 y envió sagazmente mensajeros a Abimelec, diciendo: He aquí que Gaal hijo de Ebed y sus hermanos han venido a Siquem, y he aquí, que han cercado la ciudad contra ti
32 Levántate pues ahora de noche, tú y el pueblo que está contigo, y pon emboscada en el campo
33 Y por la mañana al salir el sol te levantarás y acometerás la ciudad; y él y el pueblo que está con él saldrán contra ti, y harás con él según que se te ofrecerá
34 Levantándose, pues, de noche Abimelec y todo el pueblo que con él estaba, pusieron emboscada contra Siquem con cuatro compañías
35 Y Gaal hijo de Ebed salió, y se puso a la entrada de la puerta de la ciudad; y Abimelec y todo el pueblo que con él estaba, se levantaron de la emboscada
36 Y viendo Gaal el pueblo, dijo a Zebul: He allí pueblo que desciende de las cumbres de los montes. Y Zebul le respondió: La sombra de los montes te parece como hombres
37 Mas Gaal volvió a hablar, y dijo: He allí pueblo que desciende por en medio de la tierra, y un escuadrón que viene camino de la campiña de Meonenim
38 Y Zebul le respondió: ¿Dónde está ahora aquel dicho que decías: Quién es Abimelec para que le sirvamos? ¿No es éste el pueblo que tenías en poco? Sal pues ahora, y pelea con él
39 Y Gaal salió delante de los señores de Siquem, y peleó contra Abimelec
40 Mas lo persiguió Abimelec, delante del cual él huyó; y cayeron heridos muchos hasta la entrada de la puerta
41 Y Abimelec se quedó en Aruma; y Zebul echó fuera a Gaal y a sus hermanos, para que no moraran en Siquem
42 Y aconteció al siguiente día, que el pueblo salió al campo; y fue dado aviso a Abimelec
43 El cual, tomando a su gente, la repartió en tres compañías, y puso emboscadas en el campo; y cuando miró, he aquí el pueblo que salía de la ciudad; y se levantó contra ellos, y los hirió
44 Pues Abimelec y el escuadrón que estaba con él, acometieron con ímpetu, y se detuvieron a la entrada de la puerta de la ciudad; y las otras dos compañías acometieron a todos los que estaban en el campo, y los hirieron
45 Y después de combatir Abimelec la ciudad todo aquel día, la tomó, y mató al pueblo que en ella estaba, y asoló la ciudad, y la sembró de sal
46 Cuando oyeron esto todos los de la torre de Siquem, entraron en la fortaleza del templo del dios Berit
47 Y fue dicho a Abimelec como todos los de la torre de Siquem estaban reunidos
48 Entonces subió Abimelec al monte de Salmón, él y toda la gente que con él estaba; y tomó Abimelec un hacha en su mano, y cortó una rama de los árboles, y levantándola se la puso sobre sus hombros, diciendo al pueblo que estaba con él: Lo que me veis a mí que hago, hacedlo vosotros prestamente como yo
49 Y así todo el pueblo cortó también cada uno su rama, y siguieron a Abimelec, y las pusieron junto a la fortaleza, y prendieron fuego con ellas a la fortaleza; de manera que todos los de la torre de Siquem murieron, como unos mil hombres y mujeres
50 Después Abimelec se fue a Tebes; y puso cerco a Tebes, y la tomó
51 En medio de aquella ciudad había una torre fuerte, a la cual se retiraron todos los hombres y mujeres, y todos los señores de la ciudad; y cerrando tras sí las puertas, subieron al techo de la torre
52 Y vino Abimelec a la torre, y combatiéndola, llegó a la puerta de la torre para prenderle fuego
53 Mas una mujer dejó caer un pedazo de una rueda de molino sobre la cabeza de Abimelec, y le quebró el cráneo
54 Y luego él llamó a su escudero, y le dijo: Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió
55 Y cuando los israelitas vieron muerto a Abimelec, se fueron cada uno a su casa
56 Así devolvió Dios a Abimelec el mal que hizo contra su padre matando a sus setenta hermanos
57 Y aun todo el mal de los señores de Siquem lo hizo volver Dios sobre sus cabezas; y la maldición de Jotam, hijo de Jerobaal, vino sobre ellos

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Jueces 9:15 Y la zarza dijo a los árboles: "Si en verdad me ungís por rey sobre vosotros, venid y refugiaos a mi sombra; y si no, salga fuego de la zarza y consuma los cedros del Líbano."

English Standard Version ESV

Judges 9:15 And the bramble said to the trees, 'If in good faith you are anointing me king over you, then come and take refuge in my shade, but if not, let fire come out of the bramble and devour the cedars of Lebanon.'

King James Version KJV

Judges 9:15 And the bramble said unto the trees, If in truth ye anoint me king over you, then come and put your trust in my shadow: and if not, let fire come out of the bramble, and devour the cedars of Lebanon.

New King James Version NKJV

Judges 9:15 And the bramble said to the trees, 'If in truth you anoint me as king over you, Then come and take shelter in my shade; But if not, let fire come out of the bramble And devour the cedars of Lebanon!'

Nueva Traducción Viviente NTV

Jueces 9:15 Y el espino les respondió a los árboles:
“Si realmente quieren que yo sea su rey,
vengan a refugiarse bajo mi sombra.
Si no, que salga fuego de mí
y consuma los cedros del Líbano”».

Nueva Versión Internacional NVI

Jueces 9:15 Pero el espino respondió a los árboles:“Si de veras quieren ungirme como su rey,vengan y refúgiense bajo mi sombra;pero si no, ¡que salga fuego del espino,y que consuma los cedros del Líbano!”

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Jueces 9:15 Y el escaramujo respondió á los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, y aseguraos debajo de mi sombra: y si no, fuego salga del escaramujo que devore los cedros del Líbano.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Jueces 9:15 Y el escaramujo respondió a los árboles: Si en verdad me elegís por rey sobre vosotros, venid, y aseguraos debajo de mi sombra; y si no, fuego salga del escaramujo que devore los cedros del Líbano.

Herramientas de Estudio para Jueces 9:15-57