3 Jesús le respondió:
4 —¿Qué quieres decir? —exclamó Nicodemo—. ¿Cómo puede un hombre mayor volver al vientre de su madre y nacer de nuevo?
5 Jesús le contestó:
6 El ser humano solo puede reproducir la vida humana, pero la vida espiritual nace del Espíritu Santo.
7 Así que no te sorprendas cuando digo: “Tienen que nacer de nuevo”.
8 El viento sopla hacia donde quiere. De la misma manera que oyes el viento pero no sabes de dónde viene ni adónde va, tampoco puedes explicar cómo las personas nacen del Espíritu.
9 —¿Cómo es posible todo esto? —preguntó Nicodemo.
10 Jesús le contestó:
11 Te aseguro que les contamos lo que sabemos y hemos visto, y ustedes todavía se niegan a creer nuestro testimonio.
12 Ahora bien, si no me creen cuando les hablo de cosas terrenales, ¿cómo creerán si les hablo de cosas celestiales?
13 Nadie jamás fue al cielo y regresó, pero el Hijo del Hombre
bajó del cielo.
14 Y, así como Moisés levantó la serpiente de bronce en un poste en el desierto, así deberá ser levantado el Hijo del Hombre,
15 para que todo el que crea en él tenga vida eterna.
16 »Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.
17 Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él.
18 »No hay condenación para todo el que cree en él, pero todo el que no cree en él ya ha sido condenado por no haber creído en el único Hijo de Dios.
19 Esta condenación se basa en el siguiente hecho: la luz de Dios llegó al mundo, pero la gente amó más la oscuridad que la luz, porque sus acciones eran malvadas.
20 Todos los que hacen el mal odian la luz y se niegan a acercarse a ella porque temen que sus pecados queden al descubierto,
21 pero los que hacen lo correcto se acercan a la luz, para que otros puedan ver que están haciendo lo que Dios quiere.
22 Juan el Bautista exalta a Jesús
Luego Jesús y sus discípulos salieron de Jerusalén y se fueron al campo de Judea. Jesús pasó un tiempo allí con ellos, bautizando a la gente.
23 En ese tiempo, Juan el Bautista bautizaba en Enón, cerca de Salim, porque allí había mucha agua; y la gente iba a él para ser bautizada.
24 (Eso ocurrió antes de que metieran a Juan en la cárcel).
25 Surgió un debate entre los discípulos de Juan y cierto judío
acerca de la purificación ceremonial.
26 Entonces los discípulos de Juan fueron a decirle:
—Rabí, el hombre que estaba contigo al otro lado del río Jordán, a quien identificaste como el Mesías, también está bautizando a la gente. Y todos van a él en lugar de venir a nosotros.
27 Juan respondió:
—Nadie puede recibir nada a menos que Dios se lo conceda desde el cielo.
28 Ustedes saben que les dije claramente: “Yo no soy el Mesías; estoy aquí sólo para prepararle el camino a él”.
29 Es el novio quien se casa con la novia, y el amigo del novio simplemente se alegra de poder estar al lado del novio y oír sus votos. Por lo tanto, oír que él tiene éxito me llena de alegría.
30 Él debe tener cada vez más importancia y yo, menos.
31 »Él vino de lo alto y es superior a cualquier otro. Nosotros somos de la tierra y hablamos de cosas terrenales, pero él vino del cielo y es superior a todos.
32 Él da testimonio de lo que ha visto y oído, ¡pero qué pocos creen en lo que les dice!
33 Todo el que acepta su testimonio puede confirmar que Dios es veraz.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Juan 3:3 Respondió Jesús y le dijo: En verdad, en verdad te digo que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios.

English Standard Version ESV

John 3:3 Jesus answered him, "Truly, truly, I say to you, unless one is born again he cannot see the kingdom of God."

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Juan 3:3 Respondió Jesús, y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el Reino de Dios

King James Version KJV

New King James Version NKJV

John 3:3 Jesus answered and said to him, "Most assuredly, I say to you, unless one is born again, he cannot see the kingdom of God."

Nueva Versión Internacional NVI

Juan 3:3 —De veras te aseguro que quien no nazca de nuevo no puede ver el reino de Dios —dijo Jesús.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Juan 3:3 Respondió Jesús, y díjole: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el reino de Dios.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Juan 3:3 Respondió Jesús, y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere otra vez, no puede ver el Reino de Dios.

Herramientas de Estudio para Juan 3:3-33