16
De cierto, de cierto os digo: El siervo no es mayor que su Señor, ni el apóstol es mayor que el que le envió.
17
Si sabéis estas cosas, bienaventurados seréis, si las hiciereis.
18
No hablo de todos vosotros; yo sé los que he elegido; mas para que se cumpla la Escritura: El que come pan conmigo, levantó contra mí su calcañar.
19
Desde ahora os lo digo antes que se haga, para que cuando se hiciere, creáis que YO SOY.
20
De cierto, de cierto os digo: El que recibe al que yo enviare, a mí recibe; y el que a mí me recibe, recibe al que me envió.
21
Habiendo dicho Jesús esto, fue conmovido en el espíritu, y protestó, y dijo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me ha de entregar.
22
Entonces los discípulos mirábanse los unos a los otros, dudando de quién decía.
23
Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba sentado en la mesa al lado de Jesús.
24
A éste, pues, hizo señas Simón Pedro, para que preguntase quién era aquel de quien decía.
25
El, entonces, recostándose sobre el pecho de Jesús, le dice: Señor, ¿quién es?
26
Respondió Jesús: Aquel es, a quien yo diere el bocado mojado. Y mojando el bocado, lo dio a Judas Iscariote, hijo de Simón.