7 Y Josué subió de Gilgal, él y toda la gente de guerra con él, y todos los valientes guerreros.
8 Y el SEÑOR dijo a Josué: No les tengas miedo, porque los he entregado en tus manos; ninguno de ellos te podrá resistir.
9 Vino, pues, Josué sobre ellos de repente, habiendo marchado toda la noche desde Gilgal.
10 Y el SEÑOR los desconcertó delante de Israel, y los hirió con gran matanza en Gabaón, y los persiguió por el camino de la subida de Bet-horón, y los hirió hasta Azeca y Maceda.
11 Y sucedió que mientras huían delante de Israel, cuando estaban en la bajada de Bet-horón, el SEÑOR arrojó desde el cielo grandes piedras sobre ellos hasta Azeca, y murieron; y fueron más los que murieron por las piedras del granizo que los que mataron a espada los hijos de Israel.
12 Entonces Josué habló al SEÑOR el día en que el SEÑOR entregó a los amorreos delante de los hijos de Israel, y dijo en presencia de Israel: Sol, detente en Gabaón, y tú luna, en el valle de Ajalón.
13 Y el sol se detuvo, y la luna se paró, hasta que la nación se vengó de sus enemigos. ¿No está esto escrito en el libro de Jaser? Y el sol se detuvo en medio del cielo y no se apresuró a ponerse como por un día entero.
14 Y ni antes ni después hubo día como aquel, cuando el SEÑOR prestó atención a la voz de un hombre; porque el SEÑOR peleó por Israel.
15 Entonces Josué, y todo Israel con él, volvió al campamento en Gilgal.
16 Y aquellos cinco reyes habían huido y se habían escondido en la cueva de Maceda.
17 Y fue dado aviso a Josué, diciendo: Los cinco reyes han sido hallados escondidos en la cueva de Maceda.
18 Y Josué dijo: Rodad piedras grandes hacia la entrada de la cueva, y poned junto a ella hombres que los vigilen,
19 pero vosotros no os quedéis ahí; perseguid a vuestros enemigos y atacadlos por la retaguardia. No les permitáis entrar en sus ciudades, porque el SEÑOR vuestro Dios los ha entregado en vuestras manos.
20 Y sucedió que cuando Josué y los hijos de Israel terminaron de herirlos con gran matanza, hasta que fueron destruidos, y que los sobrevivientes que de ellos quedaron habían entrado en las ciudades fortificadas,
21 todo el pueblo volvió en paz al campamento y a Josué en Maceda. Nadie profirió palabra alguna contra ninguno de los hijos de Israel.
22 Entonces Josué dijo: Abrid la entrada de la cueva y sacadme de ella a esos cinco reyes.
23 Así lo hicieron, y le trajeron de la cueva a estos cinco reyes: el rey de Jerusalén, el rey de Hebrón, el rey de Jarmut, el rey de Laquis y el rey de Eglón.
24 Y sucedió que cuando llevaron estos reyes a Josué, Josué llamó a todos los hombres de Israel, y dijo a los jefes de los hombres de guerra que habían ido con él: Acercaos, poned vuestro pie sobre el cuello de estos reyes. Ellos se acercaron y pusieron los pies sobre sus cuellos.
25 Entonces Josué les dijo: No temáis ni os acobardéis. Sed fuertes y valientes, porque así hará el SEÑOR a todos vuestros enemigos con quienes lucháis.
26 Después Josué los hirió, les dio muerte y los colgó de cinco árboles, y quedaron colgados de los árboles hasta la tarde.
27 Y sucedió que a la hora de la puesta del sol, Josué dio órdenes y los bajaron de los árboles, y los echaron en la cueva donde se habían escondido; y sobre la boca de la cueva pusieron grandes piedras que permanecen hasta el día de hoy.
28 Y aquel día Josué conquistó a Maceda, y la hirió a filo de espada junto con su rey; la destruyó por completo con todas las personas que había en ella. No dejó ningún sobreviviente; e hizo con el rey de Maceda como había hecho con el rey de Jericó.
29 Josué, y todo Israel con él, pasó de Maceda a Libna, y peleó contra Libna;
30 y el SEÑOR la entregó también, junto con su rey, en manos de Israel, que la hirió a filo de espada con todas las personas que había en ella. No dejó ningún sobreviviente en ella, e hizo con su rey como había hecho con el rey de Jericó.
31 Josué, y todo Israel con él, pasó de Libna a Laquis, acampó cerca de ella y la atacó.
32 Y el SEÑOR entregó a Laquis en manos de Israel, la cual conquistó al segundo día, y la hirió a filo de espada con todas las personas que había en ella, conforme a todo lo que había hecho a Libna.
33 Entonces Horam, rey de Gezer, subió en ayuda de Laquis, y Josué lo derrotó a él y a su pueblo, hasta no dejar sobreviviente alguno.
34 Josué, y todo Israel con él, pasó de Laquis a Eglón, y acamparon cerca de ella y la atacaron.
35 La conquistaron aquel mismo día y la hirieron a filo de espada; y destruyó por completo aquel día a todas las personas que había en ella, conforme a todo lo que había hecho a Laquis.
36 Entonces subió Josué, y todo Israel con él, de Eglón a Hebrón, y pelearon contra ella.
37 La conquistaron y la hirieron a filo de espada, con su rey, todas sus ciudades y todas las personas que había en ella. No dejó ningún sobreviviente, conforme a todo lo que había hecho a Eglón. La destruyó por completo con todas las personas que había en ella.

English Standard Version ESV

Joshua 10:7 So Joshua went up from Gilgal, he and all the people of war with him, and all the mighty men of valor.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Josué 10:7 Y subió Josué de Gilgal, él y todo el pueblo de guerra con él, y todos los hombres valientes

King James Version KJV

Joshua 10:7 So Joshua ascended from Gilgal, he, and all the people of war with him, and all the mighty men of valour.

New King James Version NKJV

Joshua 10:7 So Joshua ascended from Gilgal, he and all the people of war with him, and all the mighty men of valor.

Nueva Traducción Viviente NTV

Josué 10:7 Entonces Josué y todo su ejército, incluidos sus mejores guerreros, salieron de Gilgal hacia Gabaón.

Nueva Versión Internacional NVI

Josué 10:7 Josué salió de Guilgal con todo su ejército, acompañados de su comando especial.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Josué 10:7 Y subió Josué de Gilgal, él y todo el pueblo de guerra con él, y todos los hombres valientes.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Josué 10:7 Y subió Josué de Gilgal, él y todo el pueblo de guerra con él, y todos los hombres valientes.

Herramientas de Estudio para Josué 10:7-37