8
Ahora pues, tomaos siete becerros y siete carneros, y andad a mi siervo Job, y ofreced holocausto por vosotros, y mi siervo Job orará por vosotros; solamente porque recibiré a él no os trataré según su locura, por cuanto no habéis hablado por mí con rectitud, como mi siervo Job
9
Fueron pues Elifaz temanita, y Bildad suhita, y Zofar naamatita, e hicieron como el SEÑOR les mandó; y el SEÑOR recibió a Job
10
Y tornó el SEÑOR la cautividad de Job, orando él por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job
11
Y vinieron a él todos sus hermanos, y todas sus hermanas, y todos los que antes le habían conocido, y comieron con él pan en su casa, y se condolieron de él, y le consolaron de todo aquel mal que el SEÑOR había traído sobre él. Y cada uno de ellos le dio una cordera, y un zarcillo de oro
12
Y el SEÑOR bendijo a la postrimería de Job más que a su principio; porque tuvo catorce mil ovejas, y seis mil camellos, y mil yuntas de bueyes, y mil asnas
13
Y tuvo siete hijos y tres hijas
14
Y llamó el nombre de la una, Jemima, y el nombre de la segunda, Cesia, y el nombre de la tercera, Keren-hapuc
15
Y no se hallaron mujeres tan hermosas como las hijas de Job en toda la tierra; y les dio su padre herencia entre sus hermanos
16
Y después de esto vivió Job ciento cuarenta años, y vio a sus hijos, y a los hijos de sus hijos, hasta la cuarta generación
17
Murió pues Job viejo, y lleno de días