10 No hay quien se atreva siquiera a provocarlo;¿quién, pues, podría hacerle frente?
11 ¿Y quién tiene alguna cuenta que cobrarme?¡Mío es todo cuanto hay bajo los cielos!
12 »No puedo dejar de mencionar sus extremidades,su fuerza y su elegante apariencia.
13 ¿Quién puede despojarlo de su coraza?¿Quién puede acercarse a él y ponerle un freno?
14 ¿Quién se atreve a abrir el abismo de sus fauces,coronadas de terribles colmillos?
15 Tiene el lomoa recubierto de hileras de escudos,todos ellos unidos en cerrado tejido;
16 tan juntos están uno al otroque no dejan pasar ni el aire;
17 tan prendidos están uno del otro,tan unidos entre sí, que no pueden separarse.
18 Resopla y lanza deslumbrantes relámpagos;sus ojos se parecen a los rayos de la aurora.
19 Ascuas de fuego brotan de su hocico;chispas de lumbre salen disparadas.
20 Lanza humo por la nariz,como olla hirviendo sobre un fuego de juncos.
21 Con su aliento enciende los carbones,y lanza fuego por la boca.
22 En su cuello radica su fuerza;ante él, todo el mundo pierde el ánimo.
23 Los pliegues de su piel son un tejido apretado;firmes son, e inconmovibles.
24 Duro es su pecho, como una roca;sólido, cual piedra de molino.
25 Cuando se yergue, los poderosos tiemblan;cuando se sacude, emprenden la huida.
26 La espada, aunque lo alcance, no lo hiere,ni lo hieren tampoco los dardos,ni las lanzas y las jabalinas.
27 Al hierro lo trata como a paja,y al bronce como a madera podrida.
28 No lo hacen huir las flechas;ve como paja las piedras de las hondas.
29 Los golpes del mazo apenas le hacen cosquillas;se burla del silbido de la lanza.
30 Sus costados son dentados tiestosque en el fango van dejando huellas de rastrillos.
31 Hace hervir las profundidades como un caldero;agita los mares como un frasco de ungüento.
32 Una estela brillante va dejando tras de sí,cual si fuera la blanca cabellera del abismo.
33 Es un monstruo que a nada teme;nada hay en el mundo que se le parezca.
34 Mira con desdén a todos los poderosos;¡él es rey de todos los soberbios!»

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Job 41:10 Nadie hay tan audaz que lo despierte; ¿quién, pues, podrá estar delante de mí?

English Standard Version ESV

Job 41:10 No one is so fierce that he dares to stir him up. Who then is he who can stand before me?

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Job 41:10 Nadie hay tan osado que lo despierte; ¿quién pues podrá estar delante de mí

King James Version KJV

Job 41:10 None is so fierce that dare stir him up: who then is able to stand before me?

New King James Version NKJV

Job 41:10 No one is so fierce that he would dare stir him up. Who then is able to stand against Me?

Nueva Traducción Viviente NTV

Job 41:10 Y como nadie se atreve a molestarlo a él,
¿quién podrá hacerme frente a mí?

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Job 41:10 Nadie hay tan osado que lo despierte: ¿Quién pues podrá estar delante de mí?

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Job 41:10 Nadie hay tan osado que lo despierte; ¿quién pues podrá estar delante de mí?

Herramientas de Estudio para Job 41:10-34