24
y él con ímpetu y furor escarba la tierra, sin importarle el sonido de la trompeta;
25
antes los toques de trompeta le infunden ánimo; y desde lejos huele la batalla, el estruendo de los príncipes, y el clamor.
26
¿Por ventura vuela el gavilán por tu industria, y extiende hacia el mediodía sus alas?
27
¿Por ventura enaltece el águila por tu mandamiento, y pone en alto su nido?
28
Ella habita y está en la piedra, en la cumbre del peñasco y de la roca.
29
Desde allí acecha la comida; sus ojos observan de muy lejos.
30
Sus polluelos chupan la sangre; y donde hubiere muertos, allí está.