9
Porque ha dicho: "Nada gana el hombre cuando se complace en Dios."
10
Por tanto, escuchadme, hombres de entendimiento. Lejos esté de Dios la iniquidad, y del Todopoderoso la maldad.
11
Porque El paga al hombre conforme a su trabajo, y retribuye a cada cual conforme a su conducta.
12
Ciertamente, Dios no obrará perversamente, y el Todopoderoso no pervertirá el juicio.
13
¿Quién le dio autoridad sobre la tierra? ¿Y quién ha puesto a su cargo el mundo entero?
14
Si El determinara hacerlo así, si hiciera volver a sí mismo su espíritu y su aliento,
15
toda carne a una perecería, y el hombre volvería al polvo.
16
Pero si tienes inteligencia, oye esto, escucha la voz de mis palabras.
17
¿Gobernará el que aborrece la justicia? ¿Y condenarás al Justo poderoso,
18
que dice a un rey: "Indigno", a los nobles: "Perversos";
19
que no hace acepción de príncipes, ni considera al rico sobre el pobre, ya que todos son obra de sus manos?
20
En un momento mueren, y a medianoche se estremecen los pueblos y pasan, y los poderosos son quitados sin esfuerzo.