21
Porque sus ojos están puestos sobre los caminos del hombre, y ve todos sus pasos
22
No hay tinieblas, ni sombra de muerte donde se encubran los que obran iniquidad
23
No carga pues él al hombre más de lo justo, para que vaya con Dios a juicio
24
El quebrantará a los fuertes sin pesquisa, y hará estar a otros en su lugar
25
Por tanto él hará notorias las obras de ellos, cuando los trastornará en la noche, y serán quebrantados
26
Como a malos los herirá en lugar donde sean vistos
27
por cuanto así se apartaron de él, y no consideraron todos sus caminos
28
haciendo venir delante de sí el clamor del pobre, y él oye el clamor de los necesitados
29
Y si él diere reposo, ¿quién inquietará? Si escondiere el rostro, ¿quién lo mirará? Esto sobre una nación, y lo mismo sobre un hombre
30
para que el hombre hipócrita no reine, y el pueblo no tropiece
31
Porque de Dios es decir: Yo perdoné, no destruiré