1
Entonces respondió Job, y dijo:
2
Aun hoy mi queja es rebelión; su mano es pesada no obstante mi gemido.
3
¡Quién me diera saber dónde encontrarle, para poder llegar hasta su trono !
4
Expondría ante El mi causa, llenaría mi boca de argumentos
5
Aprendería yo las palabras que El me respondiera, y entendería lo que me dijera.
6
¿Contendería El conmigo con la grandeza de su poder? No, ciertamente me prestaría atención.
7
Allí el justo razonaría con El, y yo sería librado para siempre de mi Juez.