4
Oh tú, que despedazas tu alma con tu furor, ¿será dejada la tierra por tu causa, y serán traspasadas de su lugar las peñas?
5
Ciertamente la luz de los impíos será apagada, y no resplandecerá la centella de su fuego.
6
La luz se oscurecerá en su tienda, y su candil se apagará sobre él.
7
Los pasos de su potencia serán acortados, y su mismo consejo lo echará a perder .
8
Porque red será echada en sus pies, y sobre red andará.
9
Lazo prenderá su calcañar; esforzará contra él los sedientos.
10
Su cuerda está escondida en la tierra, y su torzuelo sobre la senda.
11
De todas partes lo asombrarán temores, y con sus mismos pies lo ahuyentarán.
12
Su fuerza será hambrienta, y a su costilla estará aparejado quebrantamiento.
13
Comerán los ramos de su cuero, y el primogénito de la muerte tragará sus miembros.
14
Su confianza será arrancada de su tienda, y al rey de los espantos será conducido.