8 Y nosotros hemos obedecido á la voz de Jonadab nuestro padre, hijo de Rechâb, en todas las cosas que nos mandó, de no beber vino en todos nuestros días, nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas;
9 Y de no edificar casas para nuestra morada, y de no tener viña, ni heredad, ni sementera.
10 Moramos pues en tiendas, y hemos obedecido y hecho conforme á todas las cosas que nos mandó Jonadab nuestro padre.
11 Sucedió, empero, que cuando Nabucodonosor rey de Babilonia subió á la tierra, dijimos: Venid, y entrémonos en Jerusalem, de delante del ejército de los Caldeos y de delante del ejército de los de Siria: y en Jerusalem nos quedamos.
12 Y fué palabra de Jehová á Jeremías, diciendo:
13 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Ve, y di á los varones de Judá, y á los moradores de Jerusalem: ¿No recibiréis instrucción para obedecer á mis palabras? dice Jehová.
14 Fué firme la palabra de Jonadab hijo de Rechâb, el cual mandó á sus hijos que no bebiesen vino, y no lo han bebido hasta hoy, por obedecer al mandamiento de su padre; y yo os he hablado á vosotros, madrugando, y hablando, y no me habéis oído.
15 Y envié á vosotros á todos mis siervos los profetas, madrugando y enviándolos á decir: Tornaos ahora cada uno de su mal camino, y enmendad vuestras obras, y no vayáis tras dioses ajenos para servirles, y viviréis en la tierra que dí á vosotros y á vuestros padres: mas no inclinasteis vuestro oído, ni me oísteis.
16 Ciertamente los hijos de Jonadab, hijo de Rechâb, tuvieron por firme el mandamiento que les dió su padre; mas este pueblo no me ha obedecido.
17 Por tanto, así ha dicho Jehová Dios de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí traeré yo sobre Judá y sobre todos los moradores de Jerusalem todo el mal que contra ellos he hablado: porque les hablé, y no oyeron; llamélos, y no han respondido.
18 Y dijo Jeremías á la familia de los Rechâbitas: Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Porque obedecisteis al mandamiento de Jonadab vuestro padre, y guardasteis todos sus mandamientos, é hicisteis conforme á todas las cosas que os mandó;

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Jeremías 35:8 Y nosotros hemos obedecido la voz de Jonadab, hijo de Recab, nuestro padre, en todo lo que él nos mandó de no beber vino en todos nuestros días, ni nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas,

English Standard Version ESV

Jeremiah 35:8 We have obeyed the voice of Jonadab the son of Rechab, our father, in all that he commanded us, to drink no wine all our days, ourselves, our wives, our sons, or our daughters,

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Jeremías 35:8 Y nosotros hemos escuchado la voz de Jonadab nuestro padre, hijo de Recab, en todas las cosas que nos mandó, de no beber vino en todos nuestros días, nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas

King James Version KJV

Jeremiah 35:8 Thus have we obeyed the voice of Jonadab the son of Rechab our father in all that he hath charged us, to drink no wine all our days, we, our wives, our sons, nor our daughters;

New King James Version NKJV

Jeremiah 35:8 Thus we have obeyed the voice of Jonadab the son of Rechab, our father, in all that he charged us, to drink no wine all our days, we, our wives, our sons, or our daughters,

Nueva Traducción Viviente NTV

Jeremías 35:8 Así que le hemos obedecido en todas estas cosas. Nunca hemos bebido vino hasta el día de hoy, ni tampoco nuestras esposas, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas.

Nueva Versión Internacional NVI

Jeremías 35:8 Nosotros obedecemos todo lo que nos ordenó Jonadab hijo de Recab, nuestro antepasado. Nunca bebemos vino, ni tampoco lo hacen nuestras mujeres ni nuestros hijos.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Jeremías 35:8 Y nosotros hemos escuchado la voz de Jonadab nuestro padre, hijo de Recab, en todas las cosas que nos mandó, de no beber vino en todos nuestros días, nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos, ni nuestras hijas;

Herramientas de Estudio para Jeremías 35:8-18