9 Porque te eché mano de los extremos de la tierra, y de sus mojones te llamé, y te dije: Mi siervo serás tú, te escogí, y no te deseché.
10 No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios, que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
11 He aquí que todos los que se enojan contra ti, se avergonzarán y serán confusos; serán como nada; perecerán, los que contienden contigo.
12 Mirarás por ellos, y no los hallarás. Los que tienen contienda contigo, serán como nada; y los que contigo tienen pendencia, como cosa que no es.
13 Porque yo, el SEÑOR, soy tu Dios, que te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudaré.
14 No temas, gusano de Jacob, muertos de Israel; yo te socorreré, dice el SEÑOR, y tu Redentor el Santo de Israel.
15 He aquí, que yo te he puesto por trillo, trillo nuevo, lleno de dientes; trillarás montes y los molerás: y collados tornarás en tamo.
16 Los aventarás, y los llevará el viento, y los esparcirá el torbellino. Pero tú te regocijarás en el SEÑOR, te gloriarás en el Santo de Israel.
17 Los pobres y menesterosos buscan las aguas, que no hay ; su lengua se secó de sed; yo, el SEÑOR, los oiré; yo , el Dios de Israel, no los desampararé.
18 En los cabezcos altos abriré ríos, y fuentes en la mitad de los llanos; tornaré el desierto en estanques de aguas; y en manaderos de aguas la tierra seca.
19 Daré en el desierto cedros, espinos, arrayanes, y olivas; pondré en la soledad hayas, olmos, y álamos juntamente;
20 para que vean y conozcan, y adviertan y entiendan todos, que la mano del SEÑOR hace esto, y que el Santo de Israel lo crió.
21 Alegad por vuestra causa, dice el SEÑOR; traed vuestros fundamentos, dice el Rey de Jacob.
22 Traigan, y anúnciennos lo que ha de venir; dígannos lo que ha pasado desde el principio, y pondremos nuestro corazón; y sepamos su postrimería, y hacednos entender lo que ha de venir.
23 Dadnos nuevas de lo que ha de ser después, para que sepamos que vosotros sois dioses; o a lo menos haced bien, o mal, para que tengamos qué contar, y juntamente nos maravillemos.
24 He aquí que vosotros sois nada, y vuestras obras de vanidad; abominación el que os escogió.
25 Del norte desperté, y vino; del nacimiento del Sol llamó en mi nombre; y vino a príncipes Comm sobre lodo, y como pisa el barro el alfarero.
26 Quién lo anunció desde el principio, para que sepamos; y de antes, y diremos: justo. Ciertamente, no hay quién lo anuncie, ciertamente, no hay quién enseñe, ciertamente no hay quién oiga vuestras palabras.
27 Yo soy el primero que he enseñado estas cosas a Sion, y a Jerusalén di la nueva.
28 Miré, y no había ninguno; y pregunté de estas cosas, y ningún consejero hubo ; les pregunté, y no respondieron palabra.
29 He aquí, todos son vanidad; y las obras de ellos nada. Viento y confusión son sus vaciadizos.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Isaías 41:9 tú, a quien tomé de los confines de la tierra, y desde sus lugares más remotos te llamé, y te dije: "Mi siervo eres tú; yo te he escogido y no te he rechazado:"

English Standard Version ESV

Isaiah 41:9 you whom I took from the ends of the earth, and called from its farthest corners, saying to you, "You are my servant, I have chosen you and not cast you off";

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Isaías 41:9 Porque te eché mano de los extremos de la tierra, y de sus mojones te llamé, y te dije: Mi siervo serás tú, te escogí, y no te deseché

King James Version KJV

Isaiah 41:9 Thou whom I have taken from the ends of the earth, and called thee from the chief men thereof, and said unto thee, Thou art my servant; I have chosen thee, and not cast thee away.

New King James Version NKJV

Isaiah 41:9 You whom I have taken from the ends of the earth, And called from its farthest regions, And said to you, 'You are My servant, I have chosen you and have not cast you away:

Nueva Traducción Viviente NTV

Isaías 41:9 te he llamado desde los confines de la tierra,
diciéndote: “Eres mi siervo”.
Pues te he escogido
y no te desecharé.

Nueva Versión Internacional NVI

Isaías 41:9 Te tomé de los confines de la tierra,te llamé de los rincones más remotos,y te dije: “Tú eres mi siervo”.Yo te escogí; no te rechacé.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Isaías 41:9 Porque te tomé de los extremos de la tierra, y de sus principales te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú, te escogí, y no te deseché.

Herramientas de Estudio para Isaías 41:9-29