9 Por tanto, así dijo el Señor DIOS: ¡Ay de la ciudad de sangre! Pues también haré yo gran hoguera,
10 multiplicando la leña, encendiendo el fuego, para consumir la carne, y hacer la salsa; y los huesos serán quemados;
11 asentando después la olla vacía sobre sus brasas, para que se caldee, y se queme su fondo, y se funda en ella su suciedad, y se consuma su espuma.
12 En fraude se cansó, y nunca salió de ella su mucha espuma. En fuego será su espuma consumida.
13 En tu suciedad perversa padecerás , porque te limpié, y tú no te limpiaste de tu suciedad; nunca más te limpiarás, hasta que yo haga descansar mi ira sobre ti.
14 Yo, el SEÑOR, hablé; vine, e hice. No me tornaré atrás, ni tendré misericordia, ni me arrepentiré; según tus caminos y tus obras te juzgarán, dijo el Señor DIOS.
15 Y vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo:
16 Hijo de hombre, he aquí que yo te quito por muerte el deseo de tus ojos; no endeches, ni llores, ni corran tus lágrimas.
17 Reprime el suspirar, no hagas luto de mortuorios; ata tu turbante sobre ti, y pon tus zapatos en tus pies, y no te cubras con rebozo, ni comas pan de consuelo.
18 Y hablé al pueblo por la mañana, y a la tarde murió mi mujer; y a la mañana hice como me fue mandado.
19 Y me dijo el pueblo: ¿No nos enseñarás qué nos significan estas cosas que tú haces?
20 Y yo les dije: Palabra del SEÑOR vino a mí, diciendo:
21 Di a la Casa de Israel: Así dijo el Señor Dios: He aquí yo profano mi santuario, la gloria de vuestra fortaleza, el deseo de vuestros ojos, y el regalo de vuestra alma; vuestros hijos y vuestras hijas que dejasteis, caerán a cuchillo.
22 Y haréis de la manera que yo hice; no os cubriréis con rebozo, ni comeréis pan de hombres;
23 y vuestros turbantes estarán sobre vuestras cabezas, y vuestros zapatos en vuestros pies; no endecharéis ni lloraréis, sino que os consumiréis a causa de vuestras maldades, y gemiréis unos con otros.
24 Ezequiel, pues, os será por señal; según todas las cosas que él hizo, haréis; al venir esto, entonces sabréis que yo soy el Señor DIOS.
25 Y tú, hijo de hombre, el día que yo quitare de ellos su fortaleza, el gozo de su gloria, el deseo de sus ojos, y el cuidado de sus almas, sus hijos y sus hijas,
26 este día vendrá a ti un escapado para traer las nuevas.
27 En aquel día se abrirá tu boca para hablar con el escapado, y hablarás, y no estarás más mudo; y les serás por señal, y sabrán que yo soy el SEÑOR.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Ezequiel 24:9 "Por tanto, así dice el Señor DIOS: "¡Ay de la ciudad sanguinaria! Yo también haré grande el montón de leña.

English Standard Version ESV

Ezekiel 24:9 Therefore thus says the Lord GOD: Woe to the bloody city! I also will make the pile great.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Ezequiel 24:9 Por tanto, así dijo el Señor DIOS: ¡Ay de la ciudad de sangre! Pues también haré yo gran hoguera

King James Version KJV

Ezekiel 24:9 Therefore thus saith the Lord GOD; Woe to the bloody city! I will even make the pile for fire great.

New King James Version NKJV

Ezekiel 24:9 'Therefore thus says the Lord God: "Woe to the bloody city! I too will make the pyre great.

Nueva Traducción Viviente NTV

Ezequiel 24:9 »”Esto dice el Señor
Soberano:
¡Qué aflicción le espera a Jerusalén,
ciudad de asesinos!
Yo mismo amontonaré leña debajo de ella.

Nueva Versión Internacional NVI

Ezequiel 24:9 »”Porque así dice el SEÑOR omnipotente:»”¡Ay de la ciudad sanguinaria!Yo también amontonaré la leña.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Ezequiel 24:9 Por tanto, así ha dicho el Señor Jehová: ¡Ay de la ciudad de sangres! Pues también haré yo gran hoguera,

Herramientas de Estudio para Ezequiel 24:9-27