1
Cuando vayas a la casa de Dios, cuida tus pasos y acércate a escuchar en vez de ofrecer sacrificio de necios, que ni conciencia tienen de que hacen mal.
2
No te apresures,ni con la boca ni con la mente,a proferir ante Dios palabra alguna;él está en el cielo y tú estás en la tierra.Mide, pues, tus palabras.
3
Quien mucho se preocupa tiene pesadillas,y quien mucho habla dice tonterías.
4
Cuando hagas un voto a Dios, no tardes en cumplirlo, porque a Dios no le agradan los necios. Cumple tus votos:
5
Vale más no hacer votosque hacerlos y no cumplirlos.
6
No permitas que tu boca te haga pecar, ni digas luego ante el mensajero de Dios que lo hiciste sin querer. ¿Por qué ha de enojarse Dios por lo que dices, y destruir el fruto de tu trabajo?
7
Más bien, entre tantos absurdos, pesadillas y palabrerías, muestra temor a Dios.