2 y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, cuando oyeres la voz del SEÑOR tu Dios
3 Bendito serás tú en la ciudad, y bendito tú en el campo
4 Bendito el fruto de tu vientre, y el fruto de tu tierra, y el fruto de tu bestia; la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas
5 Bendito tu canastillo y tus sobras
6 Bendito serás en tu entrar, y bendito en tu salir
7 Entregará el SEÑOR tus enemigos, que se levantaren contra ti, heridos delante ti; por un camino saldrán a ti, y por siete caminos huirán delante de ti
8 Enviará el SEÑOR contigo la bendición en tus graneros, y en todo aquello en que pusieres tu mano; y te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da
9 Te confirmará el SEÑOR por pueblo suyo santo, como te ha jurado, cuando guardares los mandamientos del SEÑOR tu Dios, y anduvieres en sus caminos
10 Y verán todos los pueblos de la tierra que el nombre del SEÑOR es llamado sobre ti, y te temerán
11 Y te hará el SEÑOR que te sobreabunde el bien, en el fruto de tu vientre, y en el fruto de tu bestia, y en el fruto de tu tierra, sobre la tierra que juró el SEÑOR a tus padres que te había de dar
12 Te abrirá el SEÑOR su buen depósito, el cielo, para dar lluvia a tu tierra en su tiempo, y para bendecir toda obra de tus manos. Y prestarás a muchos gentiles, y tú no tomarás prestado
13 Y te pondrá el SEÑOR por cabeza, y no por cola; y estarás encima solamente, y no estarás debajo; cuando escuchares a los mandamientos del SEÑOR tu Dios, que yo te mando hoy, para que los guardes y cumplas
14 Y no te apartes de todas las palabras que yo os mando hoy, ni a diestra ni a siniestra, para ir tras dioses ajenos para servirles
15 Y será, si no oyeres la voz del SEÑOR tu Dios, para guardar, para poner por obra todos sus mandamientos y sus estatutos, que yo te mando hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán
16 Maldito serás tú en la ciudad, y maldito en el campo
17 Maldito tu canastillo, y tus sobras
18 Maldito el fruto de tu vientre, y el fruto de tu tierra, y la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas
19 Maldito serás en tu entrar, y maldito en tu salir
20 El SEÑOR enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano e hicieres, hasta que seas destruido, y perezcas presto a causa de la maldad de tus obras, por las cuales me habrás dejado
21 El SEÑOR hará que se te pegue mortandad, hasta que te consuma de la tierra a la cual entras para heredarla
22 El SEÑOR te herirá de tisis, de fiebre, de ardor, de calor, de espada, y de calamidad repentina, y con añublo; y te perseguirán hasta que perezcas
23 Y tus cielos que están sobre tu cabeza, serán de bronce; y la tierra que está debajo de ti, de hierro
24 Dará el SEÑOR por lluvia a tu tierra polvo y ceniza; de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas
25 El SEÑOR te entregará herido delante de tus enemigos; por un camino saldrás a ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos; y serás por estremecimiento a todos los reinos de la tierra
26 Y será tu cuerpo muerto por comida a toda ave del cielo, y bestia de la tierra, y no habrá quien las espante
27 El SEÑOR te herirá de la llaga de Egipto, con hemorroides, con sarna, y con comezón, de que no puedas ser curado
28 El SEÑOR te herirá con locura, con ceguedad, y con pasmo de corazón
29 Y palparás al mediodía, como palpa el ciego en la oscuridad, y no serás prosperado en tus caminos; y serás solamente oprimido y robado todos los días, y no habrá quien te salve
30 Te desposarás con mujer, y otro varón dormirá con ella; edificarás casa, y no habitarás en ella; plantarás viña, y no la disfrutarás
31 Tu buey será degollado delante de tus ojos, y tú no comerás de él; tu asno será arrebatado de delante de ti, y no volverá a ti; tus ovejas serán dadas a tus enemigos, y no tendrás quien te las rescate
32 Tus hijos y tus hijas serán entregados a otro pueblo, y tus ojos lo verán, y desfallecerán por ellos todo el día; y no habrá fuerza en tu mano
33 El fruto de tu tierra y todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y solamente serás oprimido y quebrantado todos los días
34 Y enloquecerás a causa de lo que verás con tus ojos
35 Te herirá el SEÑOR con maligna llaga en las rodillas y en las piernas, sin que puedas ser curado, aun desde la planta de tu pie hasta tu coronilla
36 El SEÑOR os llevará a ti, y a tu rey que hubieres puesto sobre ti, a gente que no conociste tú ni tus padres; y allá servirás a dioses ajenos, al palo y a la piedra
37 Y serás por pasmo, por proverbio y por fábula, a todos los pueblos a los cuales te llevará el SEÑOR
38 Sacarás mucha simiente a la tierra, y cogerás poco; porque la langosta lo consumirá
39 Plantarás viñas y labrarás, mas no beberás vino, ni cogerás uvas; porque el gusano las comerá
40 Tendrás olivas en todo tu término, mas no te ungirás con el aceite; porque tu aceituna se caerá
41 Hijos e hijas engendrarás, y no serán para ti; porque irán en cautiverio
42 Toda tu arboleda y el fruto de tu tierra consumirá la langosta

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Deuteronomio 28:2 Y todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán, si obedeces al SEÑOR tu Dios:

English Standard Version ESV

Deuteronomy 28:2 And all these blessings shall come upon you and overtake you, if you obey the voice of the LORD your God.

King James Version KJV

Deuteronomy 28:2 And all these blessings shall come on thee, and overtake thee, if thou shalt hearken unto the voice of the LORD thy God.

New King James Version NKJV

Deuteronomy 28:2 And all these blessings shall come upon you and overtake you, because you obey the voice of the Lord your God:

Nueva Traducción Viviente NTV

Deuteronomio 28:2 Si obedeces al Señor
tu Dios, recibirás las siguientes bendiciones:

Nueva Versión Internacional NVI

Deuteronomio 28:2 Si obedeces al SEÑOR tu Dios, todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te acompañarán siempre:

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Deuteronomio 28:2 Y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, cuando oyeres la voz de Jehová tu Dios.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Deuteronomio 28:2 y vendrán sobre ti todas estas bendiciones, y te alcanzarán, cuando oyeres la voz del SEÑOR tu Dios.

Herramientas de Estudio para Deuteronomio 28:2-42