5 Mas no quiso Jehová tu Dios oir á Balaam; y Jehová tu Dios te volvió la maldición en bendición, porque Jehová tu Dios te amaba.
6 No procurarás la paz de ellos ni su bien en todos los días para siempre.
7 No abominarás al Idumeo, que tu hermano es: no abominarás al egipcio, que extranjero fuiste en su tierra.
8 Los hijos que nacieren de ellos, á la tercera generación entrarán en la congregación de Jehová.
9 Cuando salieres á campaña contra tus enemigos, guárdate de toda cosa mala.
10 Cuando hubiere en ti alguno que no fuere limpio por accidente de noche, saldráse del campo, y no entrará en él.
11 Y será que al declinar de la tarde se lavará con agua, y cuando fuere puesto el sol, entrará en el campo.
12 Y tendrás un lugar fuera del real, y saldrás allá fuera;
13 Tendrás también una estaca entre tus armas; y será que, cuando estuvieres allí fuera, cavarás con ella, y luego al volverte cubrirás tu excremento:
14 Porque Jehová tu Dios anda por medio de tu campo, para librarte y entregar tus enemigos delante de ti; por tanto será tu real santo: porque él no vea en ti cosa inmunda, y se vuelva de en pos de ti
15 No entregarás á su señor el siervo que se huyere á ti de su amo:
16 More contigo, en medio de ti, en el lugar que escogiere en alguna de tus ciudades, donde bien le estuviere: no le harás fuerza.
17 No habrá ramera de las hijas de Israel, ni habrá sodomítico de los hijos de Israel.
18 No traerás precio de ramera, ni precio de perro á la casa de Jehová tu Dios por ningún voto; porque abominación es á Jehová tu Dios así lo uno como lo otro.
19 No tomarás de tu hermano logro de dinero, ni logro de comida, ni logro de cosa alguna que se suele tomar
20 Del extraño tomarás logro, mas de tu hermano no lo tomarás, porque te bendiga Jehová tu Dios en toda obra de tus manos sobre la tierra á la cual entras para poseerla.
21 Cuando prometieres voto á Jehová tu Dios, no tardarás en pagarlo; porque ciertamente lo demandará Jehová tu Dios de ti, y habría en ti pecado
22 Mas cuando te abstuvieres de prometer, no habrá en ti pecado.
23 Guardarás lo que tus labios pronunciaren; y harás, como prometiste á Jehová tu Dios, lo que de tu voluntad hablaste por tu boca.
24 Cuando entrares en la viña de tu prójimo, comerás uvas hasta saciar tu deseo: mas no pondrás en tu vaso.
25 Cuando entrares en la mies de tu prójimo, podrás cortar espigas con tu mano; mas no aplicarás hoz á la mies de tu prójimo.

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Deuteronomio 23:5 Mas el SEÑOR tu Dios no quiso escuchar a Balaam, sino que el SEÑOR tu Dios te cambió la maldición en bendición, porque el SEÑOR tu Dios te ama.

English Standard Version ESV

Deuteronomy 23:5 But the LORD your God would not listen to Balaam; instead the LORD your God turned the curse into a blessing for you, because the LORD your God loved you.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Deuteronomio 23:5 Mas no quiso el SEÑOR tu Dios oír a Balaam; y el SEÑOR tu Dios te volvió la maldición en bendición, porque el SEÑOR tu Dios te amaba

King James Version KJV

Deuteronomy 23:5 Nevertheless the LORD thy God would not hearken unto Balaam; but the LORD thy God turned the curse into a blessing unto thee, because the LORD thy God loved thee.

New King James Version NKJV

Deuteronomy 23:5 Nevertheless the Lord your God would not listen to Balaam, but the Lord your God turned the curse into a blessing for you, because the Lord your God loves you.

Nueva Traducción Viviente NTV

Deuteronomio 23:5 Pero el Señor
tu Dios se negó a escuchar a Balaam y convirtió esa maldición en bendición, porque el Señor
tu Dios te ama.

Nueva Versión Internacional NVI

Deuteronomio 23:5 Sin embargo, por el amor que el SEÑOR tu Dios siente por ti, no quiso el SEÑOR escuchar a Balán, y cambió la maldición en bendición.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Deuteronomio 23:5 Mas no quiso el SEÑOR tu Dios oír a Balaam; y el SEÑOR tu Dios te volvió la maldición en bendición, porque el SEÑOR tu Dios te amaba.

Herramientas de Estudio para Deuteronomio 23:5-25