1
Si habéis pues resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está el Cristo sentado a la diestra de Dios.
2
Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
3
Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con el Cristo en Dios.
4
Cuando se manifestare el Cristo, nuestra vida, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.
5
Mortificad, pues, vuestros miembros que están sobre la tierra: fornicación, inmundicia, deleite carnal , mala concupiscencia, y avaricia, la cual es servicio de ídolos;
6
por estas cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de rebelión.
7
En las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo viviendo en ellas.
8
Mas ahora, dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, palabras deshonestas de vuestra boca.