2
Cuando comenzó á reinar era de veinticinco años, y veintinueve años reinó en Jerusalem: el nombre de su madre fué Joaddan, de Jerusalem.
3
Y él hizo lo recto en ojos de Jehová, aunque no como David su padre: hizo conforme á todas las cosas que había hecho Joas su padre.
4
Con todo eso los altos no fueron quitados; que el pueblo aun sacrificaba y quemaba perfumes en los altos.
5
Y luego que el reino fué confirmado en su mano, hirió á sus siervos, los que habían muerto al rey su padre.
6
Mas no mató á los hijos de los que le mataron, conforme á lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, donde Jehová mandó, diciendo: No matarán á los padres por los hijos, ni á los hijos por los padres: mas cada uno morirá por su pecado.
7
Este hirió asimismo diez mil Idumeos en el valle de las Salinas, y tomó á Sela por guerra, y llamóla Jocteel, hasta hoy.
8
Entonces Amasías envió embajadores á Joas, hijo de Joachâz hijo de Jehú, rey de Israel, diciendo: Ven, y veámonos de rostro.
9
Y Joas rey de Israel envió á Amasías rey de Judá esta respuesta: El cardillo que está en el Líbano envió á decir al cedro que está en el Líbano: Da tu hija por mujer á mi hijo. Y pasaron las bestias fieras que están en el Líbano, y hollaron el cardillo.
10
Ciertamente has herido á Edom, y tu corazón te ha envanecido: gloríate pues, mas estáte en tu casa. ¿Y por qué te entrometerás en un mal, para que caigas tú, y Judá contigo?
11
Mas Amasías no dió oídos; por lo que subió Joas rey de Israel, y viéronse de rostro él y Amasías rey de Judá, en Beth-semes, que es de Judá.
12
Y Judá cayó delante de Israel, y huyeron cada uno á sus estancias.