12
incurriendo así en condenación, por haber abandonado su promesa anterior.
13
Y además, aprenden a estar ociosas, yendo de casa en casa; y no sólo ociosas, sino también charlatanas y entremetidas, hablando de cosas que no son dignas.
14
Por tanto, quiero que las viudas más jóvenes se casen, que tengan hijos, que cuiden su casa y no den al adversario ocasión de reproche.
15
Pues algunas ya se han apartado para seguir a Satanás.
16
Si alguna creyente tiene viudas en la familia, que las mantenga, y que la iglesia no lleve la carga para que pueda ayudar a las que en verdad son viudas.
17
Los ancianos que gobiernan bien sean considerados dignos de doble honor, principalmente los que trabajan en la predicación y en la enseñanza.
18
Porque la Escritura dice: NO PONDRAS BOZAL AL BUEY CUANDO TRILLA, y: El obrero es digno de su salario.
19
No admitas acusación contra un anciano, a menos de que haya dos o tres testigos.
20
A los que continúan en pecado, repréndelos en presencia de todos para que los demás tengan temor de pecar.
21
Te encargo solemnemente en la presencia de Dios y de Cristo Jesús y de sus ángeles escogidos, que conserves estos principios sin prejuicios, no haciendo nada con espíritu de parcialidad.
22
No impongas las manos sobre nadie con ligereza, compartiendo así la responsabilidad por los pecados de otros; guárdate libre de pecado.