7
Si él dijere: Bien está, paz tendrá tu siervo; mas si se enojare, sabe que la malicia es en él consumada.
8
Harás, pues, misericordia con tu siervo, ya que has traído tu siervo a alianza del SEÑOR contigo; y si maldad hay en mí mátame tú, que no hay necesidad de llevarme hasta tu padre.
9
Y Jonatán le dijo: Nunca tal te suceda; antes bien , si yo entendiera ser consumada la malicia de mi padre, para venir sobre ti, ¿no había yo de descubrírtelo?
10
Dijo entonces David a Jonatán: ¿Quién me dará aviso? O, ¿qué si tu padre te respondiere ásperamente?
11
Y Jonatán dijo a David: Ven, salgamos al campo. Y salieron ambos al campo.
12
Entonces dijo Jonatán a David: Oh SEÑOR Dios de Israel, cuando habré yo preguntado a mi padre mañana a esta hora, o después de mañana, y si él me hablare bien de David, si entonces no enviare a ti, y te lo descubriere,
13
el SEÑOR haga así a Jonatán, y esto añada. Mas si a mi padre pareciere bien hacerte mal, también te lo descubriré, y te enviaré, y te irás en paz; y sea el SEÑOR contigo, como fue con mi padre.
14
Y si yo viviere, harás conmigo misericordia del SEÑOR; mas si fuere muerto,
15
no quitarás perpetuamente tu misericordia de mi casa. Cuando desarraigare el SEÑOR uno por uno los enemigos de David de la tierra, aun a Jonatán quite de su casa, si te faltare ; y requiera el SEÑOR de la mano de los enemigos de David.
16
Así hizo Jonatán alianza con la casa de David.
17
Y volvió Jonatán a jurar a David, porque le amaba, porque le amaba como a su propia alma.