23
Tres veces en el año será visto todo varón tuyo delante del Señoreador DIOS, El Dios de Israel.
24
Porque yo arrojaré los gentiles de tu presencia, y ensancharé tu término; y ninguno codiciará tu tierra, cuando tú subieres para ser visto delante del SEÑOR tu Dios tres veces en el año.
25
No ofrecerás sobre leudo la sangre de mi sacrificio; ni quedará de la noche para la mañana el sacrificio de la fiesta de la pascua.
26
El principio de los primeros frutos de tu tierra meterás en la Casa del SEÑOR tu Dios. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.
27
Y el SEÑOR dijo a Moisés: Escribe tú estas palabras; porque conforme a estas palabras he hecho el pacto contigo y con Israel.
28
Y él estuvo allí con el SEÑOR cuarenta días y cuarenta noches; no comió pan, ni bebió agua; y escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos.
29
Y aconteció, que descendiendo Moisés del monte Sinaí con las dos tablas del testimonio en su mano, mientras descendía del monte, no sabía él que la tez de su rostro resplandecía, después que hubo hablado con El.
30
Y miró Aarón y todos los hijos de Israel a Moisés, y he aquí la tez de su rostro era resplandeciente; y tuvieron miedo de llegarse a él.
31
Y los llamó Moisés; y Aarón y todos los príncipes de la congregación volvieron a él, y Moisés les habló.
32
Y después se llegaron todos los hijos de Israel, a los cuales mandó todas las cosas que el SEÑOR le había dicho en el monte de Sinaí.
33
Y cuando hubo acabado Moisés de hablar con ellos, puso un velo sobre su rostro.