4 Entonces, reuniendo a todos los principales sacerdotes y escribas del pueblo, indagó de ellos dónde había de nacer el Cristo.
5 Y ellos le dijeron: En Belén de Judea, porque así está escrito por el profeta:
6 "Y TU, BELEN, TIERRA DE JUDA, DE NINGUN MODO ERES LA MAS PEQUEÑA ENTRE LOS PRINCIPES DE JUDA; PORQUE DE TI SALDRA UN GOBERNANTE QUE PASTOREARA A MI PUEBLO ISRAEL."
7 Entonces Herodes llamó a los magos en secreto y se cercioró con ellos del tiempo en que había aparecido la estrella.
8 Y enviándolos a Belén, dijo: Id y buscad con diligencia al niño; y cuando le encontréis, avisadme para que yo también vaya y le adore.
9 Y habiendo oído al rey, se fueron; y he aquí, la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que llegó y se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño.
10 Cuando vieron la estrella, se regocijaron sobremanera con gran alegría.
11 Y entrando en la casa, vieron al niño con su madre María, y postrándose le adoraron; y abriendo sus tesoros le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra.
12 Y habiendo sido advertidos por Dios en sueños que no volvieran a Herodes, partieron para su tierra por otro camino.
13 Después de haberse marchado ellos, un ángel del Señor se le apareció<***> a José en sueños, diciendo: Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto, y quédate allí hasta que yo te diga; porque Herodes va a buscar al niño para matarle.
14 Y él, levantándose, tomó de noche al niño y a su madre, y se trasladó a Egipto;
15 y estuvo allá hasta la muerte de Herodes, para que se cumpliera lo que el Señor habló por medio del profeta, diciendo: DE EGIPTO LLAME A MI HIJO.
16 Entonces Herodes, al verse burlado por los magos, se enfureció en gran manera, y mandó matar a todos los niños que había en Belén y en todos sus alrededores, de dos años para abajo, según el tiempo que había averiguado de los magos.
17 Entonces se cumplió lo que fue dicho por medio del profeta Jeremías, cuando dijo:
18 SE OYO UNA VOZ EN RAMA, LLANTO Y GRAN LAMENTACION; RAQUEL QUE LLORA A SUS HIJOS, Y QUE NO QUISO SER CONSOLADA PORQUE ya NO EXISTEN.
19 Pero cuando murió Herodes, he aquí, un ángel del Señor se apareció<***> en sueños a José en Egipto, diciendo:
20 Levántate, toma al niño y a su madre y vete a la tierra de Israel, porque los que atentaban contra la vida del niño han muerto.
21 Y él, levantándose, tomó al niño y a su madre, y vino a la tierra de Israel.
22 Pero cuando oyó que Arquelao reinaba sobre Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allá; y advertido por Dios en sueños, partió para la región de Galilea;
23 y llegó y habitó en una ciudad llamada Nazaret, para que se cumpliera lo que fue dicho por medio de los profetas: Será llamado Nazareno.

English Standard Version ESV

Matthew 2:4 and assembling all the chief priests and scribes of the people, he inquired of them where the Christ was to be born.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

Mateo 2:4 Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo

King James Version KJV

Matthew 2:4 And when he had gathered all the chief priests and scribes of the people together, he demanded of them where Christ should be born.

New King James Version NKJV

Matthew 2:4 And when he had gathered all the chief priests and scribes of the people together, he inquired of them where the Christ was to be born.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 2:4 Mandó llamar a los principales sacerdotes y maestros de la ley religiosa y les preguntó:
—¿Dónde se supone que nacerá el Mesías?

Nueva Versión Internacional NVI

Mateo 2:4 Así que convocó de entre el pueblo a todos los jefes de los sacerdotes y maestros de la ley, y les preguntó dónde había de nacer el Cristo.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

Mateo 2:4 Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

Mateo 2:4 Y convocados todos los príncipes de los sacerdotes, y los escribas del pueblo, les preguntó dónde había de nacer el Cristo.

Herramientas de Estudio para Mateo 2:4-23